Amor Salvaje •Robert Downey Jr•

Capítulo 4

Al fin terminó mi trabajo y ya me iré a mi casa, a tiempo llega la señora Susan y Robert juntos se les ve felices.

J: ¡Buenas tardes!, ¿que tal les fue señores? — pregunté de forma cortez.

S: Muy bien Jasmine, gracias.
¿Veo que ya te vas? — soltó.

J: Si ya terminé mis labores estaba por irme, justo llegaron. — les dije con mi bolso en mano.

R: ¿Quieres que te vaya a dejar? — pregunto Robert, sentándose en el sofá.

Claro que quería, era muy amable conmigo.

J: No señor... — solté deseando me insistiera.

R: Robert Downey jr, ya te dije dime Robert.

J: No Robert. — solté mientras sonreía.

R: Esta bien, necesito descansar, tuve un día muy pesado — dice subiendo a su habitación, debí decirle que si — hasta mañana Jasmine. — me dice y se desaparece de ahí.

S: ¡toma! — me dice con unos billetes en su mano.

J: ¿que no?, ¿como cree? — dije apenada.

S: ¡tómalo!, ¡Vete en un taxi! — dice insistiendo.

J: ¡Muchas gracias!, nos vemos mañana señora Susan! — Me sonríe y me voy.

Tomo el taxi y llego a mi casa para mi sorpresa ahí estaba mamá, al parecer llegó temprano.

Mamá: Hola mi amor, ¿donde estabas? — preguntó y claro no le había podido contar nada por que nunca la miraba, ya llegaba muy tarde.

J: pues ya conseguí trabajo. — dije mientras ambas nos sentamos en el sofa de la sala.

Mamá: ¿Queeeee? — dijo sorprendida — ¿por que no me habías contado?, Ah si trabajo todo el tiempo. — se dijo a si misma triste.

J: No te pongas triste, ya podré ayudar con los gastos de la casa, ¡me pagaran muy bien! — Dije emocionada.

Mamá: Pero cuéntame todo. — dijo sonriendo feliz.

Después de contarle todo, cenamos y vimos una película, llegue a mi cuarto y, ¡mierda!
No he hecho mis tareas, mi madre me pidió no descuidar mis estudios por el trabajo y no pensaba hacerlo.

Al fin termine es la 1:00am
Me tiró a mi cama, muy cansada.

Me pongo a recordar a Robert desnudo y empiezo a sentir una sensación rara, ¡naah de seguro es sueño!, pensé.
Y recordé, ¡¡¡EL BOXER!!!, Salí corriendo a buscarlo pero lo deje en el uniforme, en la casa de Robert.

¡Ojalá no lo encuentren!
Pienso en mis adentros.

Luego me quedo profundamente dormida.

Al día siguiente.

Despierto, es jueves por la mañana tengo que ir a estudiar y luego a trabajar. Esto empieza a cansarme.

Hago mi rutina diaria, me voy a la universidad, llego a mis amigas hablando con un hombre.

¿Quien será? pienso.

Llegó nos saludamos, y miro al hombre.

A: Mira te presento a Michael, es el nuevo profesor.

Pero, ¿Cómo conoce un profesor? pensé.

J: ¡Un gusto Michael!, Yo soy Jasmine. — dije tratando de no mostrar mi poco interés.

M: Un gusto, seré el nuevo profesor de historia. — dijo el hombre atractivo.

J: ¡Me alegro!, El anterior era un asco digo bromeando. — El sonríe se despide y desaparece en los estudiantes, camino a su salón.

Amy: ¿Que dijiste?, Ya lo espantaste.

Beverly: si, lástima estaba bien guapo.

J: no tanto. — digo pensado en Robert, a diferencia de él, Michael no era nadie.

Michael no estaba mal, se veía que hacía mucho ejercicio, blanco y de unos 30 años, pero tenía a Robert en mi mente y nadie me lo sacaba.
¿Podría ser amor o calentura?
Aún no estoy segura.

Luego de el día de estudio, salgo de la universidad, ya es hora de irme a trabajar, le anuncio a mis amigas, por dentro estaba feliz y era lo que más quería para poder ver a Robert.
Empezaba a necesitarlo.

Llego al fin a la casa, me voy a cambiar para poder hacer mi trabajo.

Me voy a cambiar y veo mi uniforme y automáticamente recuerdo, que ahí guarde el boxer de Robert, lo tomo, lo huelo una vez más, ¡si!, Estoy enferma pensé.
Lo guardo en mi mochila para llevármelo a mi casa.

Pasa el día todo aburrido, Susan esta en la sala con una amiga al parecer de su misma edad y posición económica, reían divertidas.

¡Que mujer más suertuda!, Tiene a Robert para ella sola, mucho dinero y una mansión.
¡Quisiera ser ella!, ¡ay! Jasmine, estas loca, pienso.

Esta vez Robert llega y se va directo a su habitación, ¿algo le habrá pasado? ó ¿sólo estará cansado?, Solo me saludo brevemente, y subió a su habitación.

J: Ya me voy señora Susan, nos vemos mañana.

S: Claro Jasmine, ¡buenas noches! — ok hoy me tocará irme sola caminando a mi casa, bueno ya me había acostumbrado y ella estaba distraída para recordarlo.

Llego a mi casa y nada normal.
Hago normalmente lo que Siempre hago.

Vaya que vida tan aburrida, pienso.
Luego recuerdo a Robert con el torso desnudo y mojado y sus piernas musculosas, y se me pasa el tonto pensamiento anterior.
Muchas quisieran eso en su vida, ¿o no?

Ahora si me lleve el boxer a mi casa, lo saco de mi mochila y sumerjo mi nariz en la tela del mismo, en el lugar en el cual quedaría la masculinidad de Robert.
Enserio huele bien, ¿Ya lo habrá usado?, pienso.

Me da igual y lo sigo olfateando deseando ya lo hubiera usado, me imagino de nuevo ver su cuerpo desnudo.  Sola en mi cuarto me sonrojo y me quedo dormida con el boxer en mis manos.