Capítulo 20

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Llegué a la oficina con mi café en mi mano y unos documentos en mis manos, mientras entraba al elevador para ir al piso en el cual estaba mi puesto.
Toque el botón al piso que deseaba subir, iba subiendo con mi mente llena de pensamientos locos y recordando la noche anterior con Michael, y recuerdo el momento en el que vio el boxer de Robert.
Me sonrojo y sonrió con el solo recuerdo de lo sucedido, recuerdo también el día que lo robé, el día que le vi su cuerpo, semidesnudo frente a mi.

El sonido de el elevador me hace regresar de nuevo a mi realidad decepcionante.

Salgo del mismo, y camino hacia mi escritorio, dejo mis cosas y veo algo en mi escritorio.
Era un sobre, ¿Que será?, Pensé.

Lo tome, quizá sea de Robert, procedo a abrirlo ansiosa de leer lo que está traía en si.

¡Era una invitación a el cumpleaños de Robert!
Claro Robert cumple años dentro de unos días, me dije.
Por tantos pensamientos en mi cabeza olvide eso, claro que asistiré.
He tratado de ocultar a Robert que Michael y yo somos novios, pero ese día lo llevaré para ver cómo reacciona.
Robert cumplirá sus 42 años y con el pasar de los mismos se ve mejor que nunca, es como si el tiempo lo hiciera cada vez más bello, y ni hablar de su carita preciosa.
De nuevo pensando en este hombre que está en la oficina a un lado mío.

Todas las empleadas de ahí siempre estaban coqueteando con él siempre, bueno no las culpo es un maldito Dios.
~

Y paso el dia y voy a salir de mi escritorio con mi bolsa en mano cuando escucho una voz la cual me detiene.

R: Jasmine podrías venir un segundo — dice con su voz sexy.

J: Claro Sr downey — dije, al parecer ya no le molesta que le diga señor.
Entró a su oficina y ahhh, había olvidado ese olor, el olor de Robert.

R: ¿Como has estado? — dice y noto que solo quiere saber de mí.

J: Pues bien señor, supongo — dije, me miró serio tratando de investigar en mi cara, mientras posaba su trasero en el escritorio haciendo muy visible su hermoso trasero.

Hablamos un rato, cuándo estaba a punto de salir siento su mano en mi brazo y me gira rápidamente.
Quedando cara a cara de nuevo, desde hace tanto tiempo no lo tenía así, a solo centímetros.
Su rostro de cerca se veía mejor, es precioso pienso de nuevo.

Estaba a punto de besarme y yo lo evado.

R: ¿Que sucede? — dice un tanto triste.

J: Que no puedo hacerlo Robert, no puedo — dije y mis ojos se empañaron de lágrimas soy una llorona pensé.

R: Lo hicimos una vez, cuando estaba con Susan, ¿Cual sería la diferencia? —  dice, no se que esta pasando, si en realidad sólo soy su juguete sexual, o no ama a Jennifer y solo está con ella por su hijo, o en realidad Robert es el hombre que desea solo tener sexo con las mujeres que desea.
Lo conocía bien en muchos aspectos.
Yo lo veía enamorado de mi, pero nunca pude confirmarlo era todo tan confuso.

J: Porque esta vez tendrás un hijo — le dije con una lágrima solitaria rondando por mi rostro — No quiero que por mi tengas problemas con Jennifer ya que no es nada amigable — le dije.

Le di un beso en su mejilla mientras los vellos de su barba hacían cosquillas en mis labios, amaba su barba, y más cuando rozaba con mi boca, pero tengo que madurar, simplemente no es para mí. Pensé.

Estaba por salir cuando de nuevo su voz me detuvo.

R: Espero no faltes para mi cumpleaños — dijo cabizbajo.

J: ¡Claro que no! —  le dije con los ojos rojos, y una sonrisa falsa, haré algo tan especial como él lo hizo conmigo para el mío.

Salí de ahí, solo para irme a mi casa.

Narra Robert

Ha pasado tanto en todo este tiempo, para empezar el día que le diría a Jasmine que la amaba y iba a preguntarle si quería ser mi novia, paso algo horrible.
Llegó Jennifer una mujer la cual siempre estuvo enamorada de mí, una que otra vez tuvimos sexo.
Pero esta vez sucedió cuando yo estaba ebrio, y no recuerdo nada, al parecer no use preservativo y pues el milagro de la vida sucedió.
Y con la persona menos indicada.

Estaba en mi oficina hablando por teléfono con un restaurante para apartarlo solo para los dos y luego de una cena, y un baile le pediría que fuera mi novia.
Colgué luego de ver cómo Jennifer entró como loca a mi oficina y detrás de ella entró Jasmine preocupada tratando de detenerla.
Luego de que ella salió, Jennifer me lo dijo y todos mis planes se vinieron abajo, por culpa del maldito alcohol, no, yo soy el irresponsable pensé.
Debo madurar, ya no soy un niño pensé.
Luego de ir al ginecólogo con ella confirmo que si, estaba embarazada y yo era el padre.
Tendría que hacerme responsable de esto y tendré que casarme con Jennifer, que pensarían de mi, de el jefe de una empresa tiene un hijo fuera del matrimonio.

Después de un tiempo me casé, era la persona más infeliz del mundo, ¿O no?.
Solo me hacía sentir vivo, el pensamiento de que por muy malo que sea tendré un hijo o hija al fin, siempre desee un varón pero igual sería feliz con una nena, pensé.
Además de ver todos los días a Jasmine, alimenta mis ojos.
Podría darle un trabajo mejor para ella, pero ya no la vería a diario en mi oficina, quizá sea egoísta pero es de las pocas cosas que le dan sentido a mi vida.
En estos momentos pienso que ni con todo el dinero que tengo, ni mi empresa podría pagar por una vida feliz al lado de Jasmine, que es lo que quisiera.

La invite a mi cumpleaños, espero y asista, espero que suceda algo similar a lo que sucedió en el cumpleaños de ella.
Más que un regalo, deseo un momento a su lado abrazarla besarla y hacerla mía una vez más.

Amor Salvaje •Robert Downey Jr•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora