Capitulo 2

2.2K 126 27
                                    

Harry

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Harry

Podía sentir el palpitante pulso en mis oídos, esa junta se prolongo una hora y no llegaron a más que gritos, así que el ministro nos dejó ir mientras el se quedaba con los Weasley, aunque yo veía a los gemelos y Charlie aburridos y con ganas de irse.

Supongo que preferían estar en su trabajo que pelear por algo que no les pertenecía por más de que se lo hayan “ganado” por ser héroes de guerra. A mí me habían ofrecido ese dinero, pero tenía suficiente en mi bóveda, además no sentía correcto tomar posesión de algo que le pertenecía a otros.

Por más que fuera Malfoy y su séquito, fueron demasiado injustos con ellos. Aunque en cierta parte tenía la culpa, yo no había hecho nada por ayudarlos, ni siquiera testifique. Ginny y Ron decían que era justo, pero ahora me parecía extremista.

Camine lo más rápido que pude hacia mi oficina antes de que alguien me interrumpiera, quería leer esa carta antes de que Romilda sintiera “curiosidad” y buscará dentro del sobre. Cuando estuve frente ella me extendió el sobre, no tenía señales de haber sido abierto.

Antes de que pudiera avanzar, anunció— Señor Potter, el Señor Black lo espera en su oficina— asentí con la cabeza y me encamine a entrar.

Abrí la puerta y me dirigí al pequeño sillón que había en la habitación para sentarme a leer la carta bajo la atenta mirada de Sirius. No me moleste, el sabía mi pequeño secreto.

Querido Harry:

Azabache de mi corazón, ¿Cómo esta todo por ahí? ¿Y los preparativos de boda? Aun no me creo que estés apuntó de casarte con Ginevra, siempre pense que estabas enamorado de mi. Pero ya vi que no.

Me dueles amor, yo te amaba.

Eso lo pondría posiblemente Chang, pero como no soy ella, solo te diré que me siento ofendida de no haber sido invitada a tan distinguida celebración, no hubiese ido, pero por lo menos tenías que enviarme la invitación. ¿Quién no querría a su sexy amiga para acompañarlo en un día tan importante?

Pero dejando de lado eso y el hecho de que no podré darte un regalo de bodas, te pregunto, ¿cuando nos vemos? Tenemos muchas cosas de que hablar Potter, extraño tu patética compañía de Gryffindor.

Espero recibir tu respuesta lo más rápido posible, me aburro mucho.

Con cariño, el amor de tu vida.
M. D

Suelto una carcajada al terminar de leer la carta, siempre me distraen al igual que su compañia. Me apresuró a tomar papel y una pluma para enviarle mi respuesta.

Querida amor de mi vida:

Lamento romperte el corazón con mi compromiso, pero sabes que es lo correcto, no podemos estar juntos. Lo nuestro es prohibido. Pero podemos ser sexys amigos.

Destinos Cruzados Donde viven las historias. Descúbrelo ahora