Las nubes estaban dispersas por todo el azul cielo, el sol apenas se asomaba, la luna se ocultaba al otro lado, llevando a las estrellas con sigo, formando así un paisaje de diferentes tonalidades, era una imagen que se podía guardar en la cabeza por miles de años.
Una pequeña ventisca fresca, una danza en las hojas de los árboles, un hermoso canto de las pequeñas aves y claro... un pequeño y curioso cachorro viendo todo desde el pequeño balcón.
Sus pequeñas y peludas orejas se movían con el viento, escuchándolo atentamente cada detalle, cada sonido, su nariz se agudizaba, llegando a sentir la tierra mojada, el perfume de su oso de peluche, el cual decían que se parecía a él. Los girasoles de la vecina, aquella dulce anciana la cual le regalaba un girasol cuando iba a su casa.
Y su colita igualmente peluda y esponjosa por la maravilla llamada cepillo, hacia que se viera como un peluche, la punta de su cola blanca como la nieve, cada día que pasaba se iba extendiendo más, como una gota de agua en papel, la cual se dispersaba hasta cierto punto, como una tinta corrida por algún químico, quedaba de una manera sorprendente después de un tiempo.
Sonrío al sentir un aroma casi irreconocible, era el aroma de la persona que más amaba en la vida, la única que le hacía un hogar con solo abrazos, la única que hacía nidos para protegerlo y poder dormir sin pesadillas.
-¿Cómo amaneciste Woo?
-Muy ben api... -abrazo más fuerte al peluche de felpa entre sus brazos y río -¿y hyun?
-Se acaba de ir bebé -cago al pequeño y este se escondió en su cuello -lo siento por despertarte tan temprano -sintió unas lamidas en su cuello y río -muy bien ya entendí... vamos a desayunar.
Ambos bajaron a la cocina y Seungmin puso a Woojin en su silla especial, una ideal a su tamaño, fue al refrigerador y empezó a sacar las cosas que prepararía.
-Él tiño Feliz ijo que hoy iriamos con él...
-Si, vino en la tarde-noche a avisarme, antes de que llegara Changbin.
-Se ollia lalo... muy glacioso -negó repetidas veces -ño, ño, Feliz ño es ñada glacioso.
-Existe un planta que el gato consume, es pequeña, cuando la consume entra en una especie de sueño y se hace muy juguetón, luego de cierto tiempo se siente cansado por la hiperactividad y se queda muy quieto y tranquilo. No todos los gatos caen ante el encanto de esa planta. En fin -puso el plato con el cereal y la leche para el menor y el se puso fruta en otro plato para sentarse frente a él -nos bañamos para estar listos, cuando Changbin venga saludas como te enseñe y nada de rascarse por nervios, no tienes pulgas.
-Ño pugas, eteñido.
🐾[...]🐾
-Changbin~ despierta... tengo hambre~ -el minino se subió a su pecho y lo miró dormir -te rasgaré esa bonita cara si no despiertas -al no recibir respuesta acercó su peluda patita a la nariz de su dueño y le dio un pico viendo como se movía -si hazme caso y párate... no Changbin~ -lloriqueo y se puso a un lado de bin -me haré pis en tu cama ¿quieres eso? ¿Eh?
El pelinegro se empezó a mover y se acomodó dándole la espalda al híbrido.
-¿Por qué es tan difícil despertar a un humano? -se sentó viendo que podía hacer -binnie... juro que me haré pis en tu cama si no te paras... compláceme... -sacó sus garritas y las enterró en la sábana para que luego le empezarán a dar arcadas.
Changbin despertó al oír un raro sonido, cuando estuvo menos despierto captó que era eso, se pegó al respaldo de la cama alejándose del híbrido.
-No Felix, en la cama no... -su frase desapareció cuando el pequeño minino ya había sacado su bolita de pelos -ahhhgg ¿por qué a mi?
ESTÁS LEYENDO
🐾Gatito huraño🐾 [changlix]
FanfictionSeo Changbin encuentra a un pequeño gatito lastimado, con la intención de cuidarlo lo lleva a su casa. Se sorprende al ver que ese chiquito no era un gato común, era un híbrido, y uno muy especial. Todos los híbridos que conocía eran de sus amigos...