¡NO Me digas!

Un Chace molesto

CAPITULO 5

Cameron Netherfield

«Quiero volver a verte»

Fue lo último que escuche decir a Scott, pues, pensándolo bien yo también tenia ganas de volver a verlo. Digo, él me ha prometido enseñarme nuevamente sus obras, así que por lo tanto tenemos que volver a vernos. De todas las personas que he conocido, incluyendo las que mi madre me presenta en sus fiestas o pretendientes adinerados, tengo que admitir que Scott me ha llamado la atención (no de la forma que piensan) claro que no, tal vez al principio lo llegue a pensar. Una noche con un bombón como ese seria un triunfo pero...todas las veces que he ido en esa dirección con algun chico los siguientes días se vuleven unos pesados.

«Volvamos a salir»

«La pase muy bien, volvamos a repetirlo»

«Deberíamos intentarlo en tu casa»

¡¿Acaso no entienden que es solo una noche?!

He tenido varios casos en los cuales deciden involucrarse en mi vida y al enterarse de como es "mi vida", la palabra pesado le queda pequeña. Son esas las razones por lo cual no veo a Scott como una posible conquista, también porque me influyó confianza, cosa que los otros chicos jamas me han transmitido. En realidad, me gustaría conocerlo.

Wuao eso debería ser un privilegio para él. Jamas decido conocer a un chico, más a allá de verlo desnudo (ustedes entienden).

-Lo harás, me has prometido volver a mostrarme tus obras, así que espero que lo cumplas.

-Claro que si.

Hice el intento de levantarme pero Scott me lo impidió- ¿Te duele? -Iba a responderle-, puedo llevarte en mi espalda.

-Si, me duele un poco -Ay por Dios, ¿A quién engaño? El maldito pie esta como nuevo, después de esos masajes que me dio ¿cómo no estarlo? Tan bien está, que podría correr un maratón ahora mismo y se preguntaran ¿por qué mentir? Pues bien, si estuvieran en mi lugar y vieran esa espalda lo entenderían.

Scott se agachó para que se me hiciera más "fácil" montarme. Finalmente estaba en su espalda, con mis brazos alrededor de su cuello. Comenzó el camino de regreso al parque donde se supone que me esta esperando Chace. En ningún momento presentí cansancio en Scott pero me daba pena hacerlo recorrer todo el camino con mi peso en su espalda y tampoco podía dejar que Chace me viera así, pobre de Scott si eso llegase a pasar.

-Ya estoy mejor Scott, puedo caminar -Le hable cerca del oído.

-¿Estas segura? No tengo ningún proble...

-Si, si estoy bien -Lo interrumpí al ver como un carro se estacionaba en la calle solitaria del parque. Scott no protestó, soltó mis piernas y dejó que me bajara. Él también había visto el carro.

Caminamos los pocos metros que nos quedaban. Chace se bajo del carro, tan chulo como siempre, con sus jeans de buena marca y su chaqueta que nunca podía faltar. Tenia un estilo de la moda exquisito y envidiable. Su cabello rubio se removía por el viento lo cual le daba un toque más exótico y sexy. Su altura es tal que parece un modelo de esos europeos, todo un papasito. Si, mi mejor amigo está de infarto.

Rodeó el carro hasta quedar en la puerta del copiloto. Su cabeza se alzó y me vio pero no duró tanto al ver que estaba acompañada. El desagrado en su rostro al ver a Scott fue tal que me dieron ganas de gritar ¡TRGAME TIERRAAAAA! Mi mejor amigo estaba viendo como torturarlo, lo conozco como la propia palma de mi mano, esa mirada desafiante que tenia lo decía todo. Debe tener mil preguntas en su cabeza ¿Por qué estoy con un chico en un parque? ¿Qué hago sin zapatos? ¿Por qué mi vestido está vuelto nada?