Una razón más

XII

Capitulo 12. Una razón más

Spencer salió de la casa del alfa el domingo a las 7:45 pues tenía que preparar la clase del día siguiente, con un abrazo y un gracias por parte del Omega, este se retiró a su departamento y cuando llegó tomo las cosas de la escuela para después sentarse y empezar a crear la clase.

Para el alfa fue una sorpresa cuando Spencer había decidido quedarse otro día pues su aroma se impregnaba un poco más en cada lugar deleitando a Morgan, cuando el Omega se fue el alfa soltó un suspiro lleno de sentimientos, llegó a su cuarto y rodo por las sábanas inhalando el aroma del Omega algo raro y nada normal para un alfa.

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El lunes llegó demasiado rápido como si hubiera una necesidad del tiempo para que llegara ese día, todos los maestros estaban en la sala discutiendo lo que pasaba al rededor, alguien había robado cosas necesarias de cada uno de ellos, algunos culpaban a el maestro recién llegado, otros expresaban que la maestra de intercambio podría ser la responsable y los últimos decían que fueron los que hicieron el exterminio, la más afectada por los robos fue Penélope que había sido arrebatada de sus archivos y de los archivos de sus alumnos.

--es mejor que salga el responsable, o les juro que los hackeare y yo sacaré al responsable de toda esta mierda– exclamó la chica de lentes mientras caminaba a la puerta para salir azotando la puerta

Todos se quedaron callados, sabían que tenían que tomarse en serio su amenaza pues la profesora era inteligente y un az en la informática siendo casi peligrosa para el mundo.

--encontraremos al culpable, por el momento vayan a sus salones a impartir clases– ordenó Gideon y se fue con un semblante cansado

Morgan y Spencer miraban todo juntos en una esquina, y fue obvio el notar cada expresión que cada persona en el cuarto tenia, desde expresiones preocupadas hasta expresiones hartas que salían del cuarto dejandolos de poco a poco solos, pero no fue así pues Savannah se quedó y empezó a caminar frente a dónde el Omega y él Alfa estaban, los dos parecían calmados a punto de irse, pero Savannah detuvo a Morgan.

--necesito hablar contigo cariño– dijo suavemente lanzando esa frase como un sutil veneno a el Omega que capto que sobraba ahí y se fue sin decir nada

--¿Que pasa?– pregunto Morgan sin dejar de ver por dónde Spencer se había ido, la Omega hizo una mueca al oler un olor ajeno a Morgan.

--hueles a él– afirmo, sorprendiendo al Alfa que rápidamente recupero su sería y fuerte compostura –¿Que pasa? ¿Ahora te gusta?– sonrió burlonamente Savannah, pero su sonrisa se desvaneció al ver la reacción del Alfa

--tengo clases, igual tú, es hora de tomar distintos caminos– respondió Morgan dando un doble significado a su frase, esperando que la Omega comprendiera.

La Omega gruño al ver como Morgan se alejaba, lo tomo del brazo y lo detuvo, con un movimiento rápido Savannah atacó sus labios, mecánicamente el Alfa le correspondió hasta que pasaron unos minutos y un fuerte portazo sonó separando a los dos que ahora intentaban regular sus respiraciones.

--es bueno saber que te sigo perteneciendo– concluyó la Omega y salió con una sonrisa triunfal en su rostro

Cuando la Omega salió Morgan se empezó a sentir fatal, con miles de preguntas en su mente una de ellas era ¿Quien los había cachado?, Pero fue callada cuando recordó quien los había cachado ya dos veces y salió corriendo.

Cuando estaba a punto de abrir la puerta del salón donde Spencer daba clases una mano la detuvo y miro quien fue el responsable, era nada más y nadie menos que la Alfa Emily Prentiss que sostenía una sonrisa suave en donde miles de sentimientos se ocultaban.

--no, Morgan, no vas a arruinar nada, vayamos a caminar– pidió Prentiss y sin esperar respuesta del Alfa empezaron a caminar por los pasillos vacíos de la institución.