El Reino Perdido

|El salvador de la tribu|

En el un lugar remoto del mar una flota del reino de fuego estaba ahí, una abeja con ojos verdes iba volando apresurada.

ー ¡Señor!ーgrito la abeja llamando la atención de un erizo, sus extremidades o casi todo estaba convertido en maquinaria, su pelaje era azul y tenía ojos rojos.

ー ¿Qué quieres?ーpregunto el erizo al ver a la abeja que llegó hasta él impaciente por una respuesta.

ー Señor, hay informantes que dijeron que el Beta está en la Tribu del Norte.ーdijo la abeja firme pero con un tono chillón y serio.

ー Entonces tenía razón... ーdijo el erizo cobalto de ojos rojos, con una sonrisa maliciosa en su boca.

La abeja se estremeció por la mirada y sonrisa del erizo, pero se mantuvo firme ante su señor.

ー ¡Alzad las velas!ーgrito el erizo.ーLe haremos una visita sorpresa a la Tribu del Norte.ーagregó con una sonrisa diabólica.

Toda la tripulación empezó a moverse y hacer su trabajo cumpliendo con la orden del erizo.

[...]

ー ¡Esto es el colmo!ーdijo enojada una eriza rosa, muy enojada.

ー Amy, tranquila.ーbuscaba tranquilizar el erizo cobalto de mirada esmeralda.

Ellos habían llegado sonrientes y con un buen humor hasta el maestro pero...

ー Las mujeres de esta tribu no pueden usar agua control, sólo curación.ーdijo el maestro que iba a entrenarlos o mejor dicho entrenar.

Y así es como nuestra querida Amy Rose, una eriza rosada estalló en cólera al oír esa tonta idea de pensar de ellos.

ー¡Pero esto no puede ser así, Sonic!ー dijo ella enojada.

[...]

Al final Sonic pudo convencerla de que sólo estudiará con Kally The Lizard en sus clases de curación y ella a regañadientes aceptó.

Por otro lado Sonic tenía que entrenar con Albert The Crocodile, él era un cocodrilo de un verde claro, aparentaba unos 80 años y  sus ojos eran morados.

ー Bien, Sonic, te enseñaré la primera maniobra.ーdijo el cocodriloーHaz que se mueva rotatoriaー agregó el cocodrilo empezando la lección, hizo un movimiento desplazando el agua y denuevo la vertió en el estanque dando el ejemplo a la enseñanza.

Nuestro hermoso erizo cobalto fallo más de lo que pudo imaginar siempre que la iba a sostener y desplazarla en medio camino el agua dejaba de moverse y caía al suelo.

[...]

Por otro lado Amy Rose estaba sentada con unas alumnas de Kally, ella miraba atentamente pero esto no era lo que quería.

Ella quería pelear no curar, quería proteger con sus manos en la batalla la vida de todos los que dependieran o no de ella.

ー Relajarse, esa es la clave, escuchar al agua y ella te responderáーdijo la lagarta con su ojos cerrados y su melodiosa voz.

Por otro lado Amy no entendí a lo que se refería.

¿Hablar con él agua? ¿Cuando has visto eso? Espera... ¿el agua al menos habla?

Todo era dudoso y sin sentido para la eriza que estaba buscando una razón a las palabras de la lagarto.

ー El agua tiene memoria, ella recuerda y nunca olvida, si la escuchas ella te dará la respuesta a tus dudas.ーdecía la lagarto tranquila, respirando armoniosamente.

Amy sólo cerró los ojos y empezó a respirar tranquilamente, dejando su mente en blanco.

ー Concentrense en el agua enfrente suyo y pidanle que cure todo mal, físico y emocional, pues ella siempre cura todo.ーdijo calmada la maestra Kally.