Capitulo 39.

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¡AVISO! Este capitulo es HOT.

»Misión para siempre.

Después de terminar de besarla, baja sus labios hacia el cuello de su blusa, tratando de sacarla. Pero esta tan perdido que ni sabe que mierda está haciendo. Ella suelta una risita, y esa es música para sus oídos. Ella se separa de el como puede y levanta su cara.
— Si quieres me la quito.. no creo que los besos la saquen por arte de magia —El asiente con una sonrisa y la ve deshacerse de ella aventándola hacia una orilla de la habitación. Se lanza a él y lo abraza, mientras sus labios se unen en un apasionado beso, las lenguas pelean por estar dentro de una boca y explorarla al máximo.  Matthew suelta un gemido, al sentir su miembro rozar el pantalón. Ella se separa un poco de él y abre los ojos.. lo mira coqueta y le pasa la lengua por los labios el cierra los ojos complacido y muerde su labio inferior, reteniéndolo por un tiempo entre sus dientes. Cuando lo suelta, hace lo mismo que ella. Le pasa la lengua por este, dejándolo aún más húmedo. Ella baja su cabeza y se toca el labio con los dedos. Suelta un suspiro y besa el pecho de Matthew, el cual está desnudo desde que llego a la habitación el deja caer su cabeza hacia atrás, mientras las manos de él acarician su cabello.. mientras sus labios van hacia su ombligo.
Ella besa su abdomen y después pasa la lengua hasta llegar a su cuello y dejarle besos ahí.
— Me vas a volver loco antes de tiempo —Habla ronco, ella suelta otra risa y empieza a hacer chupetes.
Matthew baja sus manos y las pone en su trasero, ahuecándole las nalgas ella se pega más a él por aquello y siente si miembro rosarle la pierna, pues aun esta de rodillas frente a él. Ella suelta un gemido y el la aprieta aún más. Matthew tiembla y termina poniéndola sobre sus piernas.
— Muévete nena —Le ordena el suavemente, ella asiente y separa sus labios. Su cara esta tan sonrojada, y él se ve tan apuesto en esa pose, mientras las gotitas de sudor le rodean la frente.
Empieza a moverse en círculo sobre su miembro, mientras el la ayuda con sus manos en las caderas, pero estas pronto la abandonan para buscar el broche de su sostén en su espalda, cuando lo desata, primero lo olfatea, ella lo mira burlona y después lo avienta.  Matthew deja que se siga movimiento sobre él, mientras su pene se pone aún más erecto en las nalgas de ella. Ella suspira moviéndose más rápido, mientras siente como se pone caliente todo su sexo.  Como le punza y le pide más. Joder. Jamás había experimentado eso, y se ponía nerviosa, porque no era una experta en el sexo. Pero sabía que Matthew la trataría bien.
Matthew coloca sus manos en los hombros de ella, y atrae uno de sus senos a la boca, mientras atrapa el pezón con sus dientes y lo estira, ella se arquea y se muerde el labio, mientras Matthew le dilata más su botón.
Ella se retuerce cuando una de las manos de Matthew le pellizca y le jala el pezón, sus manos le acarician el cabello pegándolo más a ella, si es que es posible.
— Matt.. —Murmura respirando rápido, él se separa de sus senos y ataca su boca, mientras la recuesta en la cama.
La besa ferozmente, mientras sus manos le exploran las piernas. Ella se mueve en la cama excitada.. Matthew se separa de sus labios hinchados y sube sus manos a los senos de nuevo, y los acaricia al mismo tiempo.
Ella suelta sonidos que lo excitan más, se separa un poco y retoma la respiración.
— Quiero comerte —Dice el, la mirada nublada de pura lujuria, ella suelta un jadea— Quiero comerte por todos lados nena —Y de nuevo la besa duro, ella extiende sus manos a la almohada y lo mira extasiada.
— Hazme lo que quieras —Murmura bajo viéndolo, él se relame los labios y baja aquel short que lleva puesto.
Después se inclina un poco y pone su mano encima de aquellas braguitas. Y acaricia su centro, ya está mojada y esto lo excita más, mientras la acaricia, la mira a los ojos. Sin despegar la vista de su hermosa cara contorsionada por el placer.
Acaricia más su centro dando círculos, mientras aumenta la velocidad, ella se retuerce en la cama. Matthew  la deja de acariciar y escucha un chillido de queja. Él sonríe de lado y después baja con cuidado las braguitas. Se inclina y besa su obligo, ella se tensa de nuevo, como la primera vez que la toco. Sabe que le apena que la vea ahí, pero.. Dios. Ella es perfecta. Tan pequeña.. como una muñeca hermosa de porcelana.. que no se puede tocar porque son tan delicadas y pueden romperse.. ella era así..
Sus labios quedan casi por sus risos, ella se pone nerviosa, Matthew coloca sus piernas alrededor de sus hombros y con sus dedos, abre sus pliegues, ella gime ante el contacto fresco de la habitación, pero suelta un jadeo alto cuando Matthew pasa su lengua por todo su sexo. Dios. Su lengua empieza a subir a bajar, y después se hunde en ella, haciendo que levantara las caderas, Matthew lo hace más rápido y ella aprieta las sabanas, pero después sus manos se encuentran en su cabello atrayéndolo más a ella, para que se profundice, hasta ella se sorprende de querer más, y lo tiene, le da más, uno de sus dedos entra en ella junto con su lengua y la acaricia, volviendo la más loca. Empieza a hacer círculos con su dedo, mientras su lengua descansa absorbiendo todo lo que ella está goteando. Llega el momento en que siente como sus piernas se tensan alrededor de él y poco a poco, reduciendo la velocidad de su penetración con lengua y dedo se separa. Ella se queja.. y se relame los labios. La mira, ella esta sonrojada y agitada.
— ¿Todo bien? —Pregunta el y le besa los labios, ella asiente con la cabeza y acaricia su mejilla.
Después, baja la mano y acaricia su pecho, aun viéndolo a los ojos. El suspira deseoso, viendo el camino que lleva aquella mano. Esta para en su pantalón de pijama y toma el elástico y lo baja. Matthew aprieta los ojos y lo avienta con los pies, queda en bóxers, ella se muerde el labio, y mete su mano allí. Siente ponerse más vivo aun con su roce.
— Tócalo —Dice el ronroneando, ella lo mira con una sonrisa y se muerde el labio, y ahora si, toma aquella dura barra con su mano, lo aprieta y el jadea— ¡ _____! —Exclama el, mientras la mano de ella baja y sube.
¿Cómo una simple niña podía hacer que se volviera loco? Dios, jura que no pararía de hacerlo con ella nunca. Y joder.. no lo haría, pues esa sonrisa que ella tiene lo anima más. El estúpido de Zac siempre tenía razón. ¿Qué demonios comía para saber de todo?
Deja de pensar tanto, cuando de nuevo la mano de ella lo aprieta, esta vez más dura. No duda en que se va correr si no aparta esa mano de ahí. Él toma su mano la quita de ahí, ella se incorpora en la cama y Matthew se baja los bóxers, juntando sus labios tiernamente.
— Dios, me muero por hundirme en ti.. —Gruñe el, ella jadea ante aquello.
— Hazme tuya.. —Murmura— Ya Matthew.
El suspira y toma el condón.. se sienta en la cama y ella lo mira confusa.
— Te toca hacerme disfrutar —Si, pero ella igual salía ganando— Móntame.
Si se estaba saliendo completamente de sus casillas. Pero sabía que a ella le gustaba..
Ella se pone encima de el de rodillas, pero sin meterse en su miembro aun, lo mira nerviosa sin saber qué hacer. Matthew sonríe tiernamente y le toma las caderas.
— Te voy a ayudar.. —Dice el, ella asiente y Matthew la impulsa hacia abajo. Ella siente como su pene le abre todo su hoyo y aprieta los ojos ante el dolor, después.. este se va metiendo más en el mientras ella baja, después se siente ya al fin, en las piernas de Matthew. Ya ha entrado, se toma de los hombros de él, y empieza a moverse de un lado a otro. Acostumbrándose al dolor que le daba.
— Joder _____, móntame —Le dice el, ella mueve su cabeza y junta sus labios. Y empieza a salir y a entrar lentamente de el, siento como Matthew tiembla en sus labios.
Matthew la ayuda a brincar más encima de el. Y empieza a jadear en sus labios, y ella no tarda, haciendo lo mismo. Ahogando todos sus jadeos en sus labios, ella se iperita más a él, sintiendo como su cuerpo se tensa alrededor del pene de Matthew. El gruñe cuando la siente tan apretada, sabiendo que va correrse.
— ¡Matthew! —Grita ella, sintiendo como su cuerpo empieza a chorrear. El respira más rápido, sintiendo como sus bolas se tensan cuando siente los jugos de ella mojarlo.
— Sí, nena, sí —Jadea el, y después se corre en aquel puto condón. Pero sabía que algún día lo haría en ella.
Y aun sus separarse el la besa tiernamente quitándole los cabellos de la cara, ella respira agotada y se abraza a él, mientras se recupera. Había sido magnifico. Y ya no puede más, tiene que decirlo.
— Te amo _____ —Y ella para de besarlo, sorprendida por lo que a dicho, abre sus ojos y lo mira.. y joder, el siente que todo se le viene abajo.. seguro la ha cagado y ella no siente nada por él.

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Misión Para Siempre {MatthewEspinosa} [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora