Día 13

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Comiendo helados.

Athena había visto el esfuerzo de todos sus caballero por entrenar a la siguiente generación de caballeros dorados, así que decidió darles un descanso a todos, la mayoría decidió pasar ese descanso en sus templos disfrutando de la compañía de sus parejas, pero para la futura dama de piscis y el león dorado, eso no era sinónimo de descanso, sino de flojera y de tiempo para jugar un poco en la cama.

Es por eso que Aioria llamó a su templo a Marín y le propuso salir a por un lado juntos a Rodorio y de vestirse como civiles, aprovechando ese descanso que su diosa les había dado, Marín con gusto aceptó y los dos se cambiaron con una ropa acorde a la ocasión.

Marín tenía una camisa de botones y un suéter de color negro azulado, una falda que hacia juego con el suéter y unos zapatos también negros azulados, por mientras Aioros tenia una camisa blanca y un bléiser negro azulado que hacia juego con sus pantalones y zapatos.

Ambos con esa vestimenta decidieron ir Rodorio a pasar su día de descanso juntos, Marín todo el tiempo mantuvo su mascara, le hubiera gustado quitársela, pero debía mantenerla si no quería romper con su estricto código de servicio a su diosa Athena, aunque siendo honestos no le molestaba del todo, ese hecho a veces le hacia sentir querida, Aioria no la quería por su físico, sino por la fuerza, la valentía y por todo lo que ella era, no solo su físico.

Aioria, sonrió como un niño cuando encontró un puesto de helados enseguida pudo le compró uno a Marín argumentando que debía probar ese majar, el muchas veces cuando bajaba a Rodorio se comía un helado, Aioria, de lo mas feliz, le compró un helado a Marín de tres bolitas, una de vainilla, otra de fresa y una de chocolate, el león personalmente pidió que se lo pusieran en uno cono y la joven pelirroja quedó más que encantada con ese detalle por parte de su novio.

Aioria sin dudarlo busco un lugar en donde su novia pudiera comer su helado tranquila, sin que nadie la viera y había encontrado el lugar perfecto a la entrada del santuario, mientras Aioria, estaba preocupado pensando en que hacer para que su novia pudiera comer tranquila, no se fijo como su novia, estaba intentando quitando quitar su mascara con una de sus manos sin éxito alguno.

Ese intentó fallido de la chica, terminó causando que una de las bolitas de helado de cayera al piso o al menos eso pensó la joven, los rápidos reflejos de Aioria, fueron más rápidos y en una de sus manos cayó la bolita de vainilla del helado, Marín aprovechó ese momento de quietud para quitarse su mascara y poder disfrutar de su lado mientras reía, gracias a la expresión de asombro de Aioria.

Al final Aioria se contagio de la risa de su novia y mientras ella se comía su helado, el comía la pequeña bolita que había caído en una de sus manos; al final de todo el león y la futura dama dorada de piscis, estaban teniendo su día de descanso, esa pequeña acción había relajado bastante a Marín y Aioria al ver lo relajada que estaba su novia, también se relajo y fue feliz.

Al final del día y después de comerse el helado, ambos subieron a leo y Marín volvió a usar su mascara, al menos hasta que volvió al templo de leo, en donde volvió a quitársela y el rubio en compañía de la pelirroja pasaron el resto de horas del día escuchando todo lo que el otro tenía que decir, hasta que ambos, se quedaron dormidos juntos, esa fue su primera vez durmiendo juntos y esa noche ambos durmieron más tranquilos y felices de lo normal.

30 Días Con Aioria Y Marin. -TERMINADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora