Día 24

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Haciendo las pases después de una pelea. 

Todos los seres humanos tienen errores y por lo general lo cometemos cuando no estamos bien emocionalmente o cuando estamos bajo mucho estrés y cuando eso sucede terminamos haciéndole daño a los que más queremos.

Aioria de Leo se sentía tan triste y deprimido por lo que hizo, que no sabía si realmente merecía ser pareja de su adorada Marín de Águila.

Se arrepentía tanto de haberlo hecho daño que no sabía cómo arreglar ese daño que causó.

Ese momento de ira le sirvió para ponerse a reflexionar sobre los errores que había cometido y se dio cuenta de que Marín había tenido la iniciativa de ir a verlo y pasar tiempo de calidad con él y todo lo había empeorado, simplemente por haberse dejado llevar por el estrés.

Aioria de Leo estaba pensando la mejor forma de pedir disculpas a Marín por sus actos, pero realmente ninguna se le ocurría y eso lo estaba volviendo loco.

No encontraba manera de pedir disculpas sin humillarse en el proceso y eso lo ponía melancólico.

Decidió ir a caminar un poco por los alrededores de su templo y no sé espero ver a Marín de águila sentada sobre lo que parecía ser el borde de una columna del templo de Leo que daba a un pequeño abismo.

El león dorado se sorprendió porque encontró a Marín con su casco sobre las piernas, como si estuviera jugando o incluso como si estuviera peinando a el casco de la armadura, aquella escena conmovió mucho al caballero de Leo y también le dio el valor para ir disculparse con el amor de su vida.

Aioria se sentó detrás de la espalda de Marín, la joven sintió la espalda del otro pero no dijo nada al respecto, simplemente espero por las palabras de Aioria, la joven amazona sabia que ella también había cometido errores y gracias a ellos lastimo al caballero de leo, pero quería escuchar a Aioria y lo que el tenia por decir. 

—Marín, sé que probablemente no quieras escucharme, pero creo que te debo una disculpa, tu tenias toda la intención de pasar tiempo conmigo y yo simplemente actué de manera imprudente y termine lastimándote, cuando lo que menos quería que pasara sucedió

—Aioria, no fuiste el único que se dejo llevar, si es cierto que me hiciste sentir mal, pero yo tampoco estoy libre de culpa, yo también actué de mala manera y como consecuencia termine huyendo y no me quede a hablar contigo, cuando claramente tenia que hacerlo. 

—Por lo que veo mi valiente guerrera esta minimizando mi culpa y si puede que tengas razón pero creo que aquí el que mas dijo fui yo. Así que yo Aioria de leo el santo dorado más rápido al servicio de Athena me disculpo contigo Marín de Piscis, el amor de mi vida. 

—Yo Marín de piscis aceptó tus disculpas y también te ofrezco mis mas sinceras disculpas...

—Aceptó tus disculpas mi hermosa santa de piscis. 

Aquellas disculpas fueron cerradas por un abrazo que Aioria no dudo en darle a su chica por detrás de su espalda, para después con sumo cuidado cargarla en sus brazos y llevarla al templo de leo en donde en ningún momento paro de repetirle lo hermosa que era y cuanto lo sentía por todo aquello que dijo y que realmente no pensaba. 

La pareja entendió sus errores y gracias a ello tuvieron el valor de pedir disculpas al otro y poder avanzar como pareja, no necesitaban nada en esta vida, junto al otro lo tenían todo y gracias que ambos reflexionaron sobre sus errores fueron capaces de hacer las pases después de una pelea y continuar mejorando cada día como pareja y como personas. 

30 Días Con Aioria Y Marin. -TERMINADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora