INGREDIENTES-El restaurante

Capitulo V: UNA NUEVA OBSESION

A las 12:00pm, era el momento en que la Anita y Samy se encontraban para no solo compartir su almuerzo, si no también ponerse al tanto sobre sus vidas y lo que ocurría en el restaurante que algunos de ellos no notara.
Ese par subía las escaleras hasta el segundo nivel ansiosos por disfrutar la hora más corta del día, sus pisadas eran difícil de ignorar, se escuchaban en toda la parte trasera del restaurante, esas escaleras de madera antigua también hacían lo suyo, parecía que una manada de animales salvajes les acompañaba.
Anita: Por fin, salimos del infierno, llegamos al paraíso.
Samy: Cada vez que vengo aquí disfruto como la primera vez la hermosa vista.
Anita: Basta de entretenerme y cuéntame de tu obsesión.
Samy: Hay Cue, pensé que ya lo habías olvidado, yo casi lo hice hermana.
Anita: Pues no deberías.
Samy: Dame una razón.

La Anita pensó por un minuto en esa razón y sin encontrar alguna cerró su silencio:
-Me la pusiste difícil (mientras acomodaba su cabello movido por el viento y quitaba la mirada del rostro de Samy), -pero encontrare alguna (Agregó).
Samy: Ves lo que te digo, además tu misma lo dijiste "Casado, clase alta, amigo de la jefa"
Anita: Y tu mismo lo dijiste, que sea su amigo nos da ventaja y lo demás lo resolvemos en el camino.
Ay anímate Sam ya hace mucho que no jugamos.

Mientras la Anita tocaba su lacio cabello Cafe, Intentaba convencer a Samy de iniciar una nueva aventura.

Samy: Mana, debería mejor buscarme algo seguro.
Anita: Ay amigo, a quien quieres engañar, sabes que sin ingredientes claves no queda buena la sopa.
Este par se echo a reír, siempre solían pasarla bien, sobre todo cuando había una nueva obsesión en la vida de Samy.

La Anita sabía que el que Samy lograra que ese hombre apuesto de 35 se fijara en el, era lo mismo que ella al día siguiente fuera la dueña del restaurante y Samy el chef encargado, pero disfrutaba mucho verlo animado y entusiasmado, el tener alguien en su vida aunque la otra persona no lo sepa, lo hacía preocuparse más por su apariencia y sonreírle más a la vida.
Samy la miraba mientras pensaba:
Lo más importante de todo es que aunque no logre nada con ese príncipe azul, ella estará ahí para hacerlo más divertido y empujarme a crear mi tumba.
Anita: Cuéntame ¿Qué tal hoy el cristal del transeúnte?
Samy: Músculos bien definidos, rostros hermosos, algunos parecían que viajaban con sus pronunciados bultos que no pude evitar mirar.
Anita: Uy, al parecer me perdí de mucho.
Samy: ¿Y a qué no sabes quien me volvió a coquetear?

La Anita sorprendida responde:
-¿Quien?
Samy: Deli
Anita: ¿Deli?
Samy: Si el Delivery.
Anita: Ay amigo, tu siempre tan confundido, ya quisieras tu que así fuera, es solo simpatía, te recuerdo que Deli ha coqueteado con todas las meseras del restaurante y siempre tan gracioso, anda por ahí haciendo bromas que te hacen confundir.

Samy: Pero el.. Olvídalo amigo, agregó la morena.
Anita: Es hora de que yo si te dé una buena noticia.
Samy: A ver..

La Anita siempre se las arreglaba para alegrarle el día a Samy y darle ese empujón hacia sus fantasías. Dándole un papel de recibo a Samy agregó:
-Aquí tienes.

Samy: ¿Ahora que debo?
Anita: Dale vuelta tonto.

Samy miró fijamente a la Anita con mucha seriedad imaginándose de que se podría tratar.

Anita: Es el nombre y apellido completo de tu futuro amante, lo tome de una tarjeta en el escritorio de la jefa.

Samy no podía creer lo que escuchaba.

Anita: ¿Listo para jugar?

Continuará...