capitulo 2

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Marco quien había llegado con la chica a su casa la acomodó en una silla y prosiguió a crear una mezcla curativa y la aplicó.

Marco: dime tienes algún nombre.

Chica: llamame hekapoo.

M: bueno hekapoo que te trajo a esta pintoresca prisión.

H: bueno principalmente trataba de encerrar a ese lagarto aquí pero no esperaba que lo pudieras matar tan fácilmente ¿dime como lo hiciste?.

M: bueno no es la primera vez que peleó con un monstruo que se regenera como el, solo tuve que poner algo de magia en mi espada mágica y pensar en el hechizo correcto y listo muerto de un golpe.

H: acaso eres un mago o algo parecido?

M: no un mago como tal pero si puedo manejar el mana como uno, pues otra cosa no pero este mundo rebosa en eso.

H: así que como es posible que un arma tan poderosa terminara en esta dimensión.

M: no termino sino se creo aqui, fue el ultimo proyectó de mi padre antes de su muerte.

H: lo siento no debí preguntar.

M: descuida fue hace mucho tiempo y tambien no deberías quedarte mucho, puede que yo no tratara de robarte tu abridor de portales pero casi todos aqui la haran.

H: te refieres mis tijeras dimencionales?

M: si, todos aqui quieren volver a sus mundos por venganza asi que cuidate o puede que te maten sobre todo considerando lo débil que eres.

Hekapoo parecía ofendida por el comentario pero recordó como mato al lagarto y pensó que podría ser verdad despues de todo ella lo quería encerrar aqui porque nadie podía venserlo, pero algo mas interesante paso por su mente y era la espada del muchacho pues tenia un aura amenazante como si hubiera matados a miles de monstruos poderosos con ella, también pensó lo peligrosa que seria si cayera en malas manos pero podria ser muy útil para el consejo magico.

Marco quien veía a hekapoo distraída con su espada pensó que seria algo nuevo para ella despues de todo estaba hecha con un mineral de la tierra natal de sus padres y era muy poco comun, marco adoraba su espada no por lo poderosa que era sino por lo que significaba para el y aunque podía crear una mas poderosa si se esforzaba mucho era mas un recuerdo de sus padres que otra cosa.

Hekapoo estaba planeando llevarse la espada de regresó con ella solo que tenia que buscar el momento oportuno para ello y justamente marco le ofreció algo de comer y cuando marco fue por algo de comida ella se paró con dificultad y agarró la espada y saltando en un portal que abrió escapo, cuando cruzo el portal ella lo cerró y se disculpo mentalmente con marco pero era un arma que tenia que ser guardada por su poder.

Cuando marco trajo la comida vio que hekapoo no estaba y acto seguido busco su espada y al no verla por ninguna parte supo que paso, marco parecía molesto y mas de lo habitual pues ya le había pasado esto antes pero era la primera vez con alguien que si podía salir de esa dimencion asi que cogió un libro que escondía detrás de un armario y comenzó a pronunciar cánticos, acto seguido una pequeña brecha apareció frente a el, era una secuela de abrir un portal y aprovechándose de esto recitó otro hechizo que abrió el portal para entrar antes que se volviera a cerrar.

Marco estaba fascinado por todas las cosas que veía pues ningún monstruo había saltado sobre el o alguna planta lo intentaban devorar y eso que solo estaba en un bosque, marco conocía las antiguas artes de la brujería y aunque aún no era tan poderoso como su madre su talento innato lo había hecho superarla hace mucho y con un conjuro que le permite rastrear objetos busco donde estaba su espada pues no la regalaría tan facilmente.

Hekapoo había llevado la espada con el consejo mágico pues tenia que ser guardada y asi evitar ser usada para el mal, todos en el consejo mágico quedaron atónitos con la espada pues no solo se parecía a la varita mágica en poder sino que tenia una mayor conduccion del poder mágico que la varita, todos votaron y la espada fue cristalizada y guardada para que asi no se pudiera usar sin que fuera una emergencia.

Marco vio a lo lejos un enorme castillo casi tan grande como los que habían en su mundo solo que este no estaba en ruinas y se dirigió hacía allá por su espada.

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