capitulo 3

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Cualquier persona que viera a marco se daba cuenta que no era de por aqui pues tenia un aura amenazante pero una cara de curiosidad inmensa, era un espectáculo ver al chico interactuar con la gente pues nunca había estado con tanta gente alrededor y aunque lo incómodo al principio su curiosidad era mas y exploró casi toda la capital de mewni hasta que recordó porque había venido.

Sabía que su espada estaba en lo profundo del castillo pero no donde exactamente asi que tenia que entrar sigilosamente, no fue algo tan difícil pues con su magia podía esquivar a la mayoría de guardias, los esquivó a todos menos a uno pues no sabia porque pero una niña pequeña parecía seguirle, la niña tenia un aura mágica pequeña por lo que se sabia que era una bruja o hija de una pero el problema es que nadie debería poder verlo asi que se le acercó y con un pequeño conjuro creo una paleta para que se fuera, la niña se fue saltando de alegría por el regalo y dejo en paz a marco.

La camara donde se guardaba su espada era como un almacén de cristales y en uno de ellos estaba su espada y claro los cristales eran un problema por su dureza pero no le tomo mucho tiempo romperlo ni tampoco activar una alarma al hacerlo, en pocos segundos estaba corriendo de cientos de guardias para luego toparse de frente con la alta comision de magia, marco vio a hekapoo entre ellos y la saludo.

M: hola hekapoo y gracias por el portal por cierto.

H: cual portal que yo recuerde lo había cerrado.

M: pues si pero no es tan difícil volver a abrir un portal, asi que si me disculpas me tengo que ir.

Toda la Comisión le había cerrado el paso y no lo dejarían pasar o al menos no con la espada, marco con un suspiró al ver esto puso su espada en su espalda y procedió a usar cánticos para hacerse mas rápido y ágil asi podria escapar pero se llevo una sorpresa cuando en un gran salto que dio su pie fue cristalizado lo cual hizo que perdiera el equilibrio y callera de cabeza al piso, el golpe lo dejo inconsciente y cuando despertó estaba en medio de una habitación con grilletes mágicos.

Estaba en un juicio y el era el acusado pues había robado una "pertenecía" de la familia real, los cargos fueron presentados y se le dijo como se declaraba.

Marco: primero que nada la espada ha sido mia durante años, segundo la ladrona es hekapoo y tercero no puedes culpar a alguien que quiere recuperar algo suyo.

La alta Comisión parecía no importarle sus razones y dictaron sentencia.

La reina: yo solaria actual reina de mewni y como parte del consejo de magia del reino te daré dos opciones A devolver la espada y nunca volver a este reino o B ser cristalizado.

M: veo que no me dejan muchas opciones asi que escojo C ninguna de las anteriores.

Acto seguido marco rompió las esposas y intento saltar por una ventana con su espada, desgraciadamente no fue lo suficientemente rápido y fue cristalizado en el intento, fue llevado hasta la misma sala donde estaba su espada, durante lo que pudieron ser fácilmente diez años intentó escapar del cristal de diferentes formas pero ninguna funciono cuando casi se había quedado sin hechizos que probar utilizo uno de corrupción que parecia si afectar al cristal pero por lo que podia sentir le tomaría mucho pero mucho tiempo escapar, ocasionalmente podía ver como venían a guardar otros prisioneros en los cristales y entonces utilizaba magia para hacer ver a su cristal normal para no llamar la atencion.

Uno de los cristales que trajeron le llamo la atención pues se parecía a la niña a la cual le dio esa paleta, los años pasaron y su hechizo casi había acabado pero algo que no tenia planeado paso pues unos monstruos tomaron a la fuerza el castillo junto con lo que parecía un mago bajito y con los ojos verdes brillantes y causo un gran alboroto.

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