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Pov Hinata

Pude ver a Shizune-San salir corriendo y solo kakashi-san, sasuke y yo quedamos en la habitación, está pérdida en mis pensamientos cuando la voz del Hokage me saco de ahí.

—¿Que te pasa Hinata? No luces feliz— decía algo frío

Yo no levante la vista, y sasuke-kun me miro.

—tramquila, solo es por ahora...en cuanto esté perfectamente sano te daré el divorcio, esto solo es un requisito —

¿Porque sasuke-kun siempre tiene que ser frío? Acaso no puede pensar un poco en los demás.

—eso que dices es una locura— dije preocupada.

—ya te dije que solo es un requisito, tan pronto como este bien, te daré el divorcio—

—bien...—

Shizune-san entró a la habitación con un formulario que era el acta de matrimonio, la cual rápidamente fue firmada y aprobada, ahora estoy casada con Sasuke-kun...ya...ya no soy una Hyuga, ¿Que dirá padre? Después de eso Sasuke entro a cirugía y si estaba muy preocupada, pero afortunadamente, Sakura-chan dijo que todo estaría bien y yo le creo.

— Sasuke-kun, come algo ¿Si?—

—¿Bromeas? Dudo que eso sea comestible— decía serio

— lo que más te agrade— pero al parecer no funcionó, y básicamente así fue por 3 días hasta que Sakura-chan me autorizo darle otro tipo de comida, que fue cuando al fin comió algo.

—¿Tu lo cocinaste?—

—Hai—

—te quedó muy bueno—

A los 5 días fue que dieron de alta a Sasuke, él no podía caminar bien, además tampoco podía correr y/o hacer esfuerzos, y me convertí en su enfermera, Sakura-chan dijo que en dos meses estará completamente recuperado.

Durante ese tiempo es expandió el rumor de que me había casado con Sasuke sin el consentimiento de mi padre, quien trato de llevarme arrastrando al clan Hyuga, pero sasuke-kun lo enfrento mostrando su Sharingan, y aunque me molesta con él por eso, pareció no importarle.

Ambos meses pasaron tranquilos, vivíamos en el apartamento de él y ni siquiera los notamos o amenos yo, porque parece que para Sasuke eso fue una eternidad, odiaba tener que usar el bastón.

Pero ya había pasado, y justamente habíamos ido a la clínica para su último chequeo.

—todo parece estar bien— decía Sakura-san

—¿De verdad?— decía sasuke-kun

—si, aunque no se la calidad de tu esperma—

Sasuke suspiro y dijo —no sabes si podré ser padre—

—no, tendrías que intentarlo—

¿Sasuke-kun quiere ser padre? No lo imaginaba ni en mis más locos sueños lo pensé, siempre decía que quería reconstruir su clan pero no lo pensé, bueno no pensé que hablara enserio pues toda su vida siempre fue por y para la venganza.

Decidimos regresar al apartamento y en ese tiempo pude verlo, con una cara sería, más seria de lo usual, ¡Debo estar loca por lo que hare! Sasuke-kun estaba en la habitación recostado mirando al techo como si fuera lo más interesante del mundo.

—Sasuke-kun— dije sonrojada pero con la mirada al piso para que no me viera.

—hmp...Hinata, lo olvidé... mañana iremos con el Hokage, para que...— interrumpí en a Sasuke en ese instante

—no, no eso...no me quiero divorciar...—

—¿Hinata?—

—de hecho..yo..am...eto...yo quería— estaba completamente roja y quería salir huyendo pero no podía.

—¿Creí que habías dejado de tartamudear hace algun tiempo?— dijo extrañado

Respiré profundo y hablé —tengamos un bebé— solté de repente apunto de desmayarme.

Sasuke-kun se quedó sorprendido, y no sabía si estaba molesta o que pasaba por su mente —Hinata...¡Estás loca! —

—¿Ha?— dije confundida, creí que era lo que él quería

—yo, planeo irme... No me puedo quedar... además, seguro lo haces por lastima más tarde iremos a la oficina del Hokage y desharemos este matrimonio — soltó frío y directo, saliendo de la habitación.

¿Que rayos le pasa? Inevitablemente, sentía como si mi corazón se rompiera en ese momento las lágrimas ni dejaban de salir de mis ojos, dios ¿Porque me pasa esto a mi?.

Llegada la hora de ir con el Hokage sasuke-kun me habló.

—vamos y acabemos con esto—

—no, no me voy a divorciar sin que me des un bebé— dije tratando de ser fría

—¿Que? ¿Que estupidez dices?estás loca Hinata—

—pues loca o no, te amo...— no pensé lo que decía, ¡Rayos! Que imprudente soy, cubrí mi boca con mis manos y trate de salir corriendo de ahí pero él lo impidió.

Su mangekyo Sharingan estaba activo y era obvia su furia, quería desaparecer justo en ese momento. —¿Que dijiste? ¡Repitelo!— soltó amenazador.

Las lágrimas cayeron a mares por mis mejillas y no podía hacer nada —perdon, yo, no, yo no quería molestarte... vayamos con el hokage— decía temblando de miedo.

—repite lo que dijiste— nuevamente su tono amenazador me hizo cerrar los ojos con fuerza, mientras me tomaba del cuello.

—que...que quiero tener un bebé contigo— dije llena de miedo.

—despues de eso—

—qu...que te amo— solté

—¿Ha si? ¿Porque?—

— porque eres alguien que tuvo la paciencia de entrenar conmigo, alguien que me protegió, quien me aceptó y ayudo a mejorar, quien me mostró cómo es una familia de verdad, el día que te hirieron, quería morir solo de saber que tal vez no sobrevivirás y...y... trate contigo porque debía compesartelo, pero poco a poco te fui amando más en estos meses, se que no soy suficiente pero trato de esforzarme...tu eres a quien amó — solté llorando e incluso un poco histérica pero no sabía que decir o hacer para que supiera que no estaba jugando y que realmente quiero tener un futuro con él.

La perfecta sincronía del PoderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora