Presidencia a su Estilo

Capítulo Siete

La temporada de elecciones del gobierno estudiantil, que representa a toda la escuela, había comenzado. Lástima que yo no podía ser miembro de un partido estudiantil, ya que las personas que pertenecían a las directivas de salón ya no podían ser parte del gobierno escolar.

Digo lástima, porque si eso sucediera gobernaría toda la escuela.

Bah. Le temían al éxito.

Ya había varios partidos que se habían postulado y comenzaron a crear sus planchas de gobierno. Luego, venían los debates en el auditorio frente a toda secundaria para presentar sus planes para hacer de la escuela un lugar mejor y las propagandas que harían en los recreos para hacerse notar frente al pueblo.

Los miembros de cada partido podían ser desde primer año hasta tercero, y gobernaban por dos años, así los estudiantes que estaban en tercero pasaban su año de cuarto y quinto al mando.

—¿Así que tu hermana es parte de un partido? —pregunté a Lukas mientras estaba acostada boca abajo sobre su cama resolviendo ejercicios mientras él estaba en su escritorio leyendo. El asintió.

—¿Cómo lo sabes?

—Yo lo sé todo —Sonreí—. Lo escuché en los baños de chicas.

—¿En realidad van al baño o a compartir chismes? —Su frente se arrugó volteando a verme. Solté una risa nasal.

—A ambas cosas.

—Algo que también no comprendo es por qué siempre van juntas al baño, es un enigma para mí —Volvió a su lectura y encogió sus hombros.

—Bueno, verás enemigo mío, eso pasa porque—

Antes de que siguiera hablando una chica pelinegra entró al cuarto, tenía el cabello liso hasta los hombros y pecas, me pareció adorable. Era la hermana de Lukas.

—Luk, ¿has visto mis tijeras? Oh —Ella me miró y yo le guiñé el ojo, una sonrisa emocionada apareció en su pecoso rostro—. Espera, ¿Qué hace Neva Espinosa en nuestra casa? ¡No me lo creo!

—Hola, Frankie —Hice un ademan con mi mano, saludándola. Sus mejillas se sonrojaron.

—¡Sabe mi nombre!

—Frankie, para de tratarla como si fuera una celebridad —dijo su hermano, pero ella lo ignoró y se acercó a mí.

—¡Eres asombrosa! Mis amigas y yo creamos una cuenta fandom de ti en Instagram, pero que hermosas fotos subes —La chica irradiaba alegría que me hizo sonreír.

—Ay, señor —Lukas llevó una mano a su frente para negar.

Reí de la actitud de su hermano y me incorporé para sentarme cruzando las piernas, palmeé a un lado de la cama para que ella también se sentara.

—No sabía que tenía una cuenta fandom. No, mentira. Si lo sabía —Hice mi cabello hacia atrás y la chica pecosa rio de forma dulce—. Al que no conocía era al administrador de la cuenta. Gracias, eh.

—De nada —Asintió con su cabeza y de pronto llevó una mano hacia las puntas de mi cabello, parecía deslumbrada—. Amo tu cabello, mis amigas y yo debatimos en que shampoo usas. Oye, ¿puedo tomarme una foto contigo?

—¡Oh, por favor! —Lukas bufó—. ¿Es en serio, Frankie?

—Ey, déjame complacer a mis fans —dije peinando mi cabello con la mano y el elevó una ceja, dándose por vencido al ver a la chica pecosa emocionada que sacó su celular y nos tomamos muchas fotos.

—Mis amigas no me lo van a creer —Frankie estaba viendo las fotos y su hermano llamó su atención.

—¿Qué necesitabas, Frankie?