Esta es la historia de dos almas atormentadas por no poder estar juntas pero que tras separarse trágicamente, vuelven a reencontrarse un siglo después.
M-preg
Capítulos cortos.
(Enero 2020)
Louis tops
Harry bottoms
Contenido Ziam y Shiall también.
Louis estaba muy nervioso, llevaba listo desde las nueve y daba vueltas por el salón de la casa de Zayn.
En su habitación, Harry ultimaba los detalles en vestir a su preciosa bebé para su bautizo.
Se había demorado bastante pues desde que le había vuelto a crecer el cabello, domar sus rebeldes rizos era un arduo trabajo.
Zayn y su novio ojimiel esperaban ya en el coche junto a Shawn y un ansioso Niall que no cesaba de mirar hacia la puerta principal de la casa, deseoso de que la pareja saliese con su ahijada para irse a la iglesia.
Habían pasado cinco meses del nacimiento de Mandy, Louis y Harry no la habían querido bautizar hasta que hubiesen reunido el dinero necesario pues no habían querido aceptar más de Zayn o de Anne.
Louis ya no pudo más, así que entró en busca de su novio.
—Amor ya es la hora...Apúntate debemos salir ya.
—Si si ya estamos—Dijo este cogiendo a su hija en brazos.
Un coche adornado con ramilletes de flores los esperas en la puerta de la casa, estos se subieron y el chofer de alquiler los llevó camino de la iglesia.
Al llegar, vieron a Gemma y Anne que nerviosas y sonrientes esperaban a las puertas del templo.
De los familiares de Louis no acudió nadie pues al parecer no estaban muy de acuerdo con la vida que el ojiazul había elegido vivir pero si habían acudido compañeros y amigos de la Universidad.
Louis y Harry contemplaron maravillados como su hermoso ángel recibió el Santísimo Sacramento y al terminar la ceremonia, un sonriente Niall se la llevó y se fue a sentar en los bancos con los demás, mientras que el ojiazul hincaba la rodilla frente a un asombrado ojiverde.
—Amor...¿Q-Qué significa esto?.
Louis sonrió y le besó la mano.
—Verás cariño...he pensado que ya que estamos aquí para bautizar a nuestra hija, podíamos hacerlo...tú y yo podíamos casarnos.
—Que... ¿qué?
—Amor te amo y tú me amas—prosiguió el ojiazul—¿Por qué esperar más?
—Oh Dios Louis...¿lo dices de verás?
—Claro, Harry... ¿Amor quieres casarte conmigo en este momento?
—Si...si claro que si —respondió el ojiverde saltando a los brazos de su novio— Oh Dios mío...te amo tanto.
En el altar frente al sacerdote, ambos leyeron sus votos matrimoniales y las promesas de futuro que previamente Louis, con la ayuda cómplice de sus amigos había escrito.
La bonita ceremonia llegó a su fin y los ya esposos, salieron felices y sonrientes seguidos de sus invitados camino al restaurante.
El banquete les esperaba no muy lejos de allí en un hermoso lugar, con un amplio jardín, con todas las mesas adornadas con flores.
Todos felices, comieron, bebieron, bailaron y aplaudieron a los felices y orgullosos esposos hasta bien entrada la noche, cuando ya el cansancio se hizo presente y regresaron a casa.
Ya en la intimidad de su habitación, Harry y Louis celebraron su noche de bodas con una botella de champán con dos copas que les esperaba en la mesilla regalo del morocho.
Brindaron felices como si fuese el mejor champán francés.
—Brindo por la vida que nos ha permitido volvernos a encontrar y pido que en esta vida podamos seguir siendo tan felices como hasta ahora....te amo Hazza.
—Yo brindo porque nuestras almas vuelvan a encontrarse una y otra vez en vidas futuras, como lo han hecho en esta...te amo Louis y siempre te amaré.
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