Capítulo 10.

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Coñazos, muchas confusiones, y ¿Playa?

Megan.

Hecho: Connor iba a matarme.

Hecho curioso: Acabo de darme cuenta de que mis medias no coinciden.

Hecho triste: Iba a morir sin comerme mi conflei favorito.

-¡Ven para acá, Dawson! -Su grito hace que me ponga a correr todavía más rápido.

Explico rápidamente. Connor vino a buscarme para ir al instituto pero se dio cuenta de que arruiné su camisa favorita. Se arrechó. Iba a matarme. Listo.

–¡¿Tú crees que yo soy pendeja para dejarme atrapar justo ahora?! –Pregunté sarcásticamente. –¡No seas tú tan webón, mijo!

–¡LE ABRISTE HUECOS, MEGAN, HUECOS! ¿QUIÉN HACE ESO? –Gritó viniendo detrás de mí. Agradezco que el patio mi casa ahora sea lo suficientemente grande para que no me atrape tan fácil.

–PUES YO, DEJA TU MARIQUERA QUE A MÍ ME DAÑASTE UNA HACE UN MES.
–DÍSCULPAME POR NO SABER LAVAR ENTONCES.

–Pero bueno, ¿Cuál es tu gritadera pues? –Frené de golpe viéndolo mal.

–Tú comenzaste a gritarme primero.

Lo miré mal de nuevo y él se acercó a mí. Awanta, la piscina estaba justo ahí, a un metro de nosotros, Connor venía con una cara de malicia brutal.

Ok, ya sé lo que va a pasar.

¡CORRE, PERRA, CORRE!

Y volví a meterme el cohete en el culo antes de que él llegase a tocarme siquiera un pelo. Vamos bien.

Le di la vuelta a la piscina dos veces, hasta que paré 5 segundos en busca de aire y sentí el cuerpo de Connor chocar con él mío, duro.

Y caímos al agua.

Malditasea.

–¡Connor, pero viste que tú nojombre! ¡TENEMOS QUE IR AL INSTITUTO EN CUARENTA MINUTOS, ROLITRANCO E' MMAGUEVO! –Le grité echándole agua en la cara.

–¡TÚ FUISTE LA QUE SE PARÓ DE COÑAZO, NO ME ECHES LA CULPA A MÍ NADA MÁS!

Y así duramos unos diez minutos peleando sobre de quién era la culpa. Llegamos a un conclusión de manera civilizada, era de ambos, y por civilizada me refiero a que casi nos volvemos a caer a golpes.

Sí, sí, ya sé. Yo me caigo a golpes con todos mis amigos, es very normal.

******

–¡Corre que vamos a llegar tarde para historia, nojoda! –Le grité a Connor mientras me puse a correr como desgraciada por los pasillos del instituto.

No es mi culpa, iba a llegar tarde y Bradfor era una ladilla.

–¡Pero quitate nojoda! ¿No ves que estoy llegando tarde? –Empujé a un carajo ahí que es de un grado menor que yo.

Alta lacra, vale, yo iba era llegando tarde.

Aviso que si llegué temprano a la clase de Bradfor. A hacer un coño por cierto, porque había faltado kike porque estaba enfermo, enfermo el webo mío nojoda, casi boto un pulmón en el pasillo para que me vengan a decir que está enfermo. ¿Cuál es la güeboná pues?

But, no sé de que me quejo si a los cinco minutos me puse a pendejear con medio salón en el patio. Hasta vídeos tenemos, uwu.

En fin, se hizo la hora del almuerzo y yo me fui, relajao cm qn dice a la cafetería. Regia, con Luka a un lado y con Connor al otro, puro tipo serio, cero marioteo.

Sí, me gustas, ¿Y qué? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora