Capítulo XII

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Pasaron varios días mientras Miguel se debatía entre la vida y la muerte debido a sus heridas, había perdido mucha sangre, por lo que tuvo que recibir varias transfusiones de sangre. Cuando pudo despertar consciente, su novia se mantenía al lado de la cama, su cabeza estaba apoyada en la camilla del chico, lo que indicaba que estaba descansando.

- Te ves tan hermosa como recuerdo. – dice Miguel con un hilo de voz.

- ¿Qué? – pregunta Diana entre sorprendida y somnolienta.

- Que te ves muy hermosa. – le repite el chico.

- ¡Miguel, despertaste! – exclama Diana abalanzándose hacia el chico para abrazarlo.

- ¡Ay! – se queja el chico por lo bajo.

- Sepárese señorita. – le pide una enfermera que llegaba por el ruido causado.

Después que le realizaron varios exámenes al chico, declararon que estaba fuera de peligro, pero debía continuar descansado por si sufría una recaída.

Varios oficiales visitaron a Miguel en una oportunidad para interrogarlo sobre lo sucedido, el joven les confesó todo lo que le había contado, incluso lo que dijo sobre el asalto a la casa de su amiga, ellos, al igual que él, también quedaron desconcertados, pues la descripción de los delincuentes era la misma de los que estaban encerrados y el que había muerto.

Carlos y Karla visitaron varias veces a Miguel mientras se encontraba en el hospital, y les confesó que los médicos le dieron la noticia de que en una semana podría irse de nuevo a su casa, sería dado de alta.

- Carlos, quédate un momento, por favor. – le pide Miguel a su mejor amigo.

- Bueno, cuéntame. – habla el amigo mayor devolviéndose, ya que se encontraba a punto de cerrar la puerta cuando salía.

- ¿Ocurrió algún incidente con Karla por el camino? – pregunta el joven herido.

- ¿A qué te refieres? – pregunta Carlos, sentándose de nuevo.

- ¿Ella se comportaba de manera extraña en algún momento? – pregunta nuevamente Miguel.

- Bueno, lo único extraño es que revisaba su teléfono en todo momento, estando incluso con sus familiares, me pidió que me quedara en su casa para que no estuviese sola durante todo el tiempo que estuvimos allá, aun así, no se separaba en ningún momento de su celular. – le cuenta Carlos.

Miguel le pidió a su mejor amigo que mantuviera a la chica vigilada muy de cerca mientras él se encontrase hospitalizado; pero sobre todo, que le diera importancia a proteger a Diana. Como vio que su amigo no entendía su petición, le explico sobre sus sospechas, quería estar prevenido contra cualquier situación irregular que pudiera suceder. Carlos aceptó su petición.

Todo mi amor para tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora