Capítulo 7

1.3K 157 10
                                        

Habían pasado cuatro días desde qué miré a Off y pensé que la sensación de sus caricias desaparecería, pero era todo lo contrario. Es como si las anhelara tanto que solo se volvían más intensas. Quería volver a tener lo que me hizo sentir.

—¿Gun? —Me llamó Jennie, por lo que, me giré despegando así la mirada de mi computadora.

—¿Sí?

—Mike está al teléfono —Me lo mostró —Al parecer te ha estado marcando —susurró la última frase para que él no alcanzara a escucharla.

—Oh, gracias —Tomé el aparato de sus manos.

—Me retiro —se giró y se fue, así que lleve el teléfono a mi oído.

—¿Hola? ¿Mike?

—Gun, ¿Qué has estado haciendo? llevo marcándote desde hace tiempo y no me contestas —Exclamó con el coraje desbordante en sus palabras.

—Mi celular está en silencio —solté un suspiro —Estoy escribiendo y suelo ponerlo así, lo sabes.

—¿Pero no lo tienes cerca para la que lo sientas vibrar?

—Mike, ¿necesitas algo? ¿o solo vamos a pelear por no contestar?

Soltó un suspiro sordo.

—Lo siento, si, te llamaba para algo importante. Tengo un viaje de negocios —guardo silencio.

—Bueno... que te vaya bien —Miré a Monet intentar alcanzar una de mis plantas, así que me levanté.

—Quiero que vengas conmigo.

Me detuve en seco, confundido.

—¿Para qué?

—Para estar juntos.

—¿Este es el viaje del que hablabas? —Puse mi planta en una repisa más alta.

—No, yo... yo quiero que confíes en mí y pensé que si venías conmigo ayudaría a qué no tengas malos pensamientos de mi fuera de casa.

Tomé oxígeno.

—No necesitamos llegar a eso.

Ya nunca confiaré en ti. No necesitas estar tan lejos para serme infiel. Lo sé.

—Gun, por favor —suplicó —Estoy poniendo lo máximo de mi —guardo silencio por varios segundos que me hizo pensar que colgó —¿Ya no me amas? —Murmuró al final.
Mis ojos rodaron mientras me sentaba de nuevo.

—Mike, no hagas eso.

—Entonces ven conmigo, dame esa oportunidad.

Cerré los ojos frustrado porque sabía que mi terquedad a no querer ir a parte de no quererlo cerca, era por si Off me llamaba. Eso era estúpido de mi parte y me enojaba tener ese comportamiento por él, un hombre casado.

—De acuerdo —murmuré —Pero quiero mi habitación.

—Pe...

—Esa es mi condición, Mike.

Soltó un suspiro.

—Bien. Lo tomo.

—¿Cuándo es?

—Salimos hoy en la noche.

¿Qué?

—Pero... ¿Cuándo volvemos?

—Son dos noches allá.

Tragué duro con la necesidad de retractarme, pero ¿para qué? ¿para rogarle a Off que mañana volviéramos a tener sexo?

Prohibido amar | OffGun | ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora