Friendzone

8. Celos

Yeosang

Tengo novio y soy feliz con mi decisión de haber aceptado serlo, pero me duele mucho que por ello esté perdiendo a mi mejor amigo.

Desde hace un rato no puedo dejar de pensar en si se trata de celos, por su parte, por como me compartió sus sentimientos teniendo que rechazarlos por varias razones como la de no corresponder a ellos, no hacerle daño y que es mi mejor amigo. En el momento en que se confesó, ese día en que compartió dichos sentimientos conmigo yo ya estaba saliendo con mi novio y no podía decirle que no iba a salir con él, con Seonghwa, porque ya tenia novio.

Eso le rompería el corazón, además de nuestra amistad.

— ¿Te encuentras bien? —saliendo de mis pensamientos miro a Hun —parece que te has perdido en unos pensamientos poco agradables. ¿Es sobre nosotros?

— Sobre Seonghwa —miro mis manos —es mi mejor amigo como bien sabes y se está distanciando de mi. No se porque realmente pero lo está haciendo.

— A lo mejor no es por ti sino porque esté saliendo con alguien —le enseño la foto que hace unos minutos ha publicado —no hacen mala pareja. Podríamos quedar los cuatro algún día si quieres.

— No se si son novios asique ya se lo diré.. no creo que sea muy buena idea pero lo intentaré —un gritito escapa de entre mis labios cuando tumbado queda sobre mi —¿qué haces?

Sin usar palabra alguna pero si sus labios para besarme cierro los ojos, abrazándome a su cuello, a su cuerpo, ahogando un gemido en el momento en que su mano se cuela por debajo de mi camiseta, rozando mi abdomen, subiendo lentamente, arqueando mi espalda al rozar uno de mis pezones. Su lengua no tarda en hacerse presente, uniéndose hambrienta con la mia, quitándome la poca capacidad de respirar que me quedaba por mi mismo, siendo ahora que compartimos incluso eso.

Incorporándonos, sentado sobre sus muslos, me aferro mejor a su cuerpo, permitiendo acceso a mi cuello donde varios besos son repartidos, besos cálidos, húmedos, incluso seguro alguna marca que deja aún sabiendo que no me gusta, resignándome por ya estar hecho, volviendo a tomar sus labios, viendo de reojo como en la pantalla de mi móvil vuelve a aparecer una nueva publicación, varias más bien, que ahora no me preocupo en ver, ignorándolo, dejándome llevar por cada beso con mi novio, cada caricia por su parte, por la mia, cada prenda que desaparece.

Sentándome despacio para no despertar a Hun cojo mi móvil, ese que estaba perdido entre las sábanas, y lo desbloqueo revisando esa publicación de hace casi una hora.

No se realmente si mi mejor amigo y ese otro serán novios pero no puedo negar que harían una buena pareja, incluso que Seonghwa podría ser feliz con él si le diese una oportunidad. Cubriendo bien mi cuerpo desnudo con la sábana deslizo una por una cada foto, cada imagen, viendo como desde la primera hasta la cuarta tan solo salen haciendo expresiones graciosas, las cuales a cualquier otro le harían reír pero a mi no, llegando así a la séptima donde la mano de ese está en el cuello de Seonghwa, los ojos de ambos cerrados, sus rostros demasiado cerca, mientras que en la octava y última todos esos detalles se unen a uno más, a sus labios acariciando los ajenos, siendo un beso el que han decidido compartir con el mundo.

Sin poder dejar de verla una sensación extraña me invade, más en la parte de mi cuerpo donde una presión se concentra, un extraño hormigueo que nunca antes he sentido, siendo algo incomodo.

Saliendo de las imágenes que Seonghwa ha publicado, de la aplicación incluso, abro ese chat que teníamos ciertamente abandonado, en el que parece que ahora está en linea, decidiéndome a escribirle un mensaje.

Yeo: Hola amigo, espero no interrumpir nada importante. ¿Te encuentras bien?

Visto a las 15:05

Seonghwa: Hola Yeosang.. Si, me encuentro perfectamente y estoy algo ocupado ahora ¿por qué? ¿Necesitas algo?

Visto a las 15:06

Yeo: No necesito nada. Solo quería hablar un rato con mi mejor amigo. Desde que hemos hablado hace unas horas en la academia y por la forma en la que te has ido he estado preocupado. ¿Estás trabajando?

Visto a las 15:06

Bajo su nombre tan solo puedo ver como sigue en linea, no que esté escribiendo ni nada parecido, sintiéndome un poco extraño, con esa sensación aún invadiéndome incluso cuando como unos doce minutos después vuelve a responder, deteniéndome por un momento a ver su nueva imagen de perfil, sintiendo la punzada con más fuerza, ignorándola, ocupándome tan solo de leer su mensaje.

Seonghwa: Estoy en casa todavía. Hasta dentro de un rato no tengo que trabajar, amigo. Pero realmente si estoy ocupado asique te hablaré a la noche si no estoy muy cansado.

Visto a las 15:20

Leyendo ese mensaje como cuatro veces, imaginando como está Seonghwa ocupado, que está haciendo más bien para estarlo, lo dejo a un lado, saliendo de la cama, yendo al baño y a la ducha, intentando relajar bajo el agua templada mi tenso cuerpo y esa angustiosa sensación que parece no querer abandonarme en absoluto, ni cuando mi novio aparece de la nada, interrumpiendo en el momento en que mi cuerpo está lleno de jabón, liberándome tan solo un poco, muy muy poco, de la tensión acumulada.

— ¿Por qué estás tan tenso? —niego despacio —¿habéis peleado?

Vuelvo a negar, sin ganas de hablar de ello, de nada más bien, aclarando mi cuerpo lleno de jabón, saliendo no mucho después, secando con pereza, con lentitud mi cuerpo, vistiéndome con un pantalón corto cualquiera, una camiseta que cojo al azar, saliendo de casa sin dar ninguna explicación después de anudar los cordones de mis zapatillas, echando a correr sin mirar un rumbo fijo, acelerando cada paso, mi velocidad, perdiéndome en mi mismo, en el rumbo que tomo, en eso que siento de pronto, en el miedo que perder a mi mejor amigo me da, en todo absolutamente, deteniéndome no se cuanto después, cansado, sudoroso, mareado, dejándome caer en un banco cualquiera, cubriendo mi rostro con mis manos ahora húmedas, mirando esas pequeñas gotitas que bañan mis palmas, limpiándome bajo los ojos al comprender.

— ¿Qué me está pasando?

Volviendo a ponerme en pie, a iniciar mi rumbo pero no en dirección a mi casa, a ese lugar donde Hun estará esperándome seguramente hasta que vuelva, tarde lo que tarde, llego a ese otro donde creo poder encontrar una sabia respuesta, unas palabras cálidas tal vez, deteniéndome en esa pequeña pero acogedora habitación, entrando de forma tan lenta, cuidadosa, dejándome caer de rodillas frente a mi abuela, quien parece hoy estar mejor por como sostiene mi rostro entre sus arrugadas manos, dedicándome una sonrisa que pocas veces ya tengo ocasión de ver.

— ¿Qué le preocupa a mi pequeño Yeonnie? —su voz siempre tan dulce —¿has peleado con tu amiguito otra vez?

— Creo que estoy perdiéndole abuela.. es mi mejor amigo pero siento algo extraño aquí —señalo donde exactamente.

— ¿Tiene a alguien más en su vida? —asiento, recordando ese beso que han compartido —mi pequeño principito, lo que a ti te pasa es que estás celoso. Lo que siente mi pequeño niño son celos. Amas demasiado a tu amigo y el temor de perderle y que esté con otro chico ha despertado ese sentimiento en ti. Cuando era joven también lo llegué a sentir con tu abuelo y es algo normal de lo que no te tienes que preocupar.

Mirando a mi abuela, sus manos ahora sobre su regazo, en como a poco se queda dormida, no dejo de pensar en esas palabras, en una en concreto, aún de rodillas sobre el frio suelo, tratando de comprenderlo, de entender esa palabra, esa que al parecer también va con los sentimientos, en eso que mi sabia abuela ha denominado como..

Celos.