A lo largo de la vida recibimos varios golpes que nos debilitan.
Sin embargo hay Impactos que por una de sus tantas definiciones es dejar una huella que marca el inicio de algo para bien o para mal.
Estos son los míos.
Primer Impacto: Mi mejor amiga...
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Convencer a Cam de la operación era uno de mis mayores logros en esta vida, de cierta forma si fue una esperanza para mí, pero ese "si" también podría llevárselo en un abrir y cerrar los ojos.
La cirugía sería por la mañana y aunque lo único que quería hacer era estar con él todo el tiempo que pudiera él tenía otros planes.
—¡Largo! — me gritó.
—No me iré, dormiré en el suelo de ser necesario —me quejé.
—Has estado aquí todos los días, dame un respiro camarera —se quejó.
—Nunca —me cruce de brazos.
Él suspiró irritado pero se calmó.
—Mañana me operan y sé que estarás aquí todo momento —dijo más calmado.
—Así es —conteste lo que ya sabía.
—Serán muchas horas —aclaró— ve a casa y descansa.
Suspiré pero tenía razón, me acerqué y bese sus labios.
—Te veré por la mañana —sonreí.
—Ya que —contestó.
Me fui a casa a dormir porque realmente lo necesitaba.
Al llegar mi hermano preparaba la cena.
—Se quemó un poco pero creo que está rico —sonrió.
—Gracias pero iré a tomar un baño y después a desmayarme en mi cama —anuncie.
Como dije tome un buen baño de burbujas y me tiré en mi cama, de un momento a otro mis ojos se llenaron de lágrimas.
—Se pondrá bien —dijo mi hermano desde la puerta.
—Es solo... tengo miedo —confesé— porqué si muere será mi culpa.
Mi hermano me abrazó y me dejo llorar en su hombro.
Lloré hasta quedarme dormida.
Por la mañana me preparé con todo lo necesario, pasando por algo antes de ir al hospital.
Al llegar estaba Ellen y Sam con él, incluso el trío de idiotas.
—¿Acaso tienen una fiesta de la que no estoy enterada? —pregunté.
—Así es pero la acabas de arruinar —contestó Cam.
Yo solo puse los ojos en blanco.
—Mejor nos vamos —comentó Aiden.
Los chicos se despidieron dejando a Ellen, Sam y a mí con él.
—¿Estás listo? —preguntó Sam.
—Para una cirugía con pocas posibilidades de sobrevivir, siempre —sonrió.
—Saldrás bien —comentó Ellen— no me puedes dejar con estos dos.
