Kocho Kanae estaba radiante, casi parecía que estaba brillando en el comedor sentada junto a sus hermanas y primas mientras desayunaban, causando que éstas se le quedaran mirando asombradas.
- Kanae-oneechan, ¿te encuentras bien? - Preguntó una joven Aoi Kanzaki.
A lo que Kanae la miro mientras peinaba el cabello de Kanao y le dijo con una enorme sonrisa - Me encuentro sensacional, gracias por preguntar Aoi-chan
- ¿Qué rayos pasó ayer en la escuela Onee-san? - preguntó Shinobu - desde que volviste has estado súper contenta, incluso estabas tarareando mientras preparabas la cena anoche.
- Oh! nada en especial mi querida Shinobu-chan, no te preocupes por mi jejeje - dijo ya una cada vez más roja Kanae, dándose cuenta que era el centro de atención de esa mañana - Si no nos apuramos, llegaremos tarde a la escuela - dijo nerviosa mientras se levantaba recogiendo sus cosas y se disponía a irse.
"Qué vergüenza", pensó Kanae la cual tenía sus dos manos sobre sus mejillas mientras caminaba a la estación del tren. Y es que el origen de su felicidad es que por fin había podido hacer las paces con Shinazugawa-san, cuando ella se había ofrecido a ayudarlo a ponerse al día en sus notas éste había aceptado y para colmo de males le había comprado un presente, algo que ella claramente no esperaba, aquel particular pero lindo llavero de un gatico malhumorado, el cual ya llevaba adherido a su mochila, era la otra razón que la tenía en las nubes aquella mañana. La noche anterior se había quedado viéndolo por horas antes de irse a dormir, pensando que de cierta manera éste era muy parecido a Shinazugawa-san, lo cual era extremadamente tierno, y no pudo evitar preguntarse si él fue consciente de ello cuando lo compró.
Pero de un momento a otro, Kanae paró, como si alguien hubiese presionado el botón de apagado que todos los humanos tenían en su nuca, ya que en el momento en que estaba a punto de entrar a la estación de tren cayó en cuenta que probablemente se encontraría con Shinazugawa-san, y que estarían los dos solos por aproximadamente 15 minutos que era lo que se demoraba el trayecto a la Kimetsu School, ésto hizo que se sintiera realmente nerviosa, no entendía del todo por que, pero es como si desde el momento en que ellos por fin se habían reconciliado algo dentro de ella hubiera cambiado, ahora el solo hecho de pensar en Shinazugawa la ponía realmente inquieta. "¿De que vamos a hablar?", "¿se sentirá incómodo si lo molesto en el tren?", "Dios, que me pasa, no es como si no hubiéramos hablado ayer un rato" se dijo así misma mientras se daba unas palmaditas en las mejillas con las manos, y prosiguió con su camino.
Pero para su decepción, Shinazugawa no se encontraba en el tren esa mañana, esto puso a Kanae un poco triste, aunque trato de no darle mucha importancia. Después de llegar a la escuela y subir a su salón, como era costumbre, su grupo de amigas se encontraban en el pasillo al frente del aula y al verla se acercaron a ella para saludarla.
- Buenos días Kanae-chan, ¿como estás? - a lo que la aludida, como siempre respondió con su característica energía
- Buenos días chicas, muy bien.
- Oh! - de repente una de ellas exclamó - ¿es eso un nuevo peluche que llevas en tu mochila?
A lo que Kanae un poco nerviosa respondió - S-Si, jejeje lo recibí hace poco.
- Kyaaaa ¿de quien?, comenzaron a gritar el grupo de animadas chicas, mientras se acercaban más hacia Kanae, rodeándola para que no escapara.
- ¿Es de la escuela?
-¿te lo regaló un chico, te gusta?
-¿quién es? por favor por favor dinos!
Y así un bombardeo de preguntas empezaron a llover sobre la presidenta del consejo estudiantil, la cual solo podía levantar sus manos en un esfuerzo por salvaguardar su espacio personal, "¿gustarme?" pensó para sí misma, e inevitablemente un color rosa comenzó a brotar de sus mejillas empeorando su situación, ya que sus amigas al ver esto, aumentaron la intensidad del interrogatorio.
ESTÁS LEYENDO
Amores inconclusos - SaneKana
RomanceA pesar de que ellos creían que sus caminos nunca más se iban a cruzar, el destino y el amor querian otra cosa. Todos los derechos sobre los personajes mencionados en nuestros fanfics, pertenecen a sus respectivos autores Kimetsu no Yaiba - Koyoharu...