Lan Zhan alcanzo la inmortalidad junto con su hermano, haciendo la promesa de buscar a Wei Ying, pero cuando por fin lo encontró, él jamas lo miro con amor, para él era solo un extraño.
Lan Zhan miro como una y otra vez el amor de su vida lo dejo p...
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Jin GuangYao entro a la casa de Lan XiChen, sentándose en la mesa si antes echar una mirada al rededor de está, observando todo.
—Es una casa muy bonita —pronunció con una sonrisa en los labios
Lan XiChen no se sentía nada bien con su presencia, pero aunque estuviera enojado, nunca dejo de ser educado, por lo cual encendió la tetera para servir té.
—Toma —le dio una taza a Jin GuangYao y sentó frente a él
—Gracias
—Por favor lo que vayas a decir que sea rápido, hoy personalmente no tengo ánimos de lidiar con nadie ─indicó con una frialdad en su mirada.
—Oh, entiendo —sonrió para tomar su té —Antes que nada quería agradecerte por dejar libre a Jiang Cheng
—¿Cómo sabes eso? ─cuestionó
—Facíl, hice que Xue Yang los siguiera, estuviste toda la noche con él, para luego marcharte en las primeras horas del día, después Wei Ying recogió a Jiang Cheng, ¿sabes?, lo triste del asunto es que A-Cheng estaba tan mal, qué incluso sus manos sangraban
Lan XiChen al escuchar eso apretó la taza té con tal fuerza que se hizo pedazos en su mano, el agua caliente del té hizo que su mano se pusiera roja, se levantó sin alguna señal de dolor y limpio su desastre.
—¿Haz venido a decirme solo eso?, Porqué si es así, puedes marcharte ─pronunció molesto
—No, no yo solo vine a decirte que no importa cuánto hagas, Jiang Cheng va ser mío, no me mal intérpretes, yo no tengo malas intenciones hacia él, verás, cuando era aún el hijo de una sirvienta todos me miraban desde arriba sin embargo un día Jiang Cheng me vio, llevaba una bandeja con aperitivos, pero me tropecé, todos en el lugar se rieron, pero alguien no, un chico de 12 años tomo la bandeja y me ayudó a levantarme, me sonrió, esa persona era Jiang Cheng, cuando comencé a tener los problemas en la empresa pensé que su ayuda me serviría, pero luego lo recordé, entiendo que no solo lo quería para que me ayudara si no lo quería a mi lado, por lo cual yo vine a decirte que, pelearé con quién sea, para obtener el amor de Jiang Cheng —se levantó de la mesa
—Ya veo ─musitó
La expresión de Lan XiChen se oscureció al punto que provocaba miedo, Jin GuangYao se sintió intimidado por su mirada.
—Bueno como no hay más que decir, me retiro, gracias por el té.
Jin GuangYao salió de la casa.
Lan XiChen pudo entender con las palabras de Jin GuangYao, que en primera no parecía recordar su vida pasada, segundo no era inmortal, por lo cual hizo que un dolor punzante atravesara su corazón como un cuchillo caliente, se había dado cuenta del error que había cometido, se dejó llevar por sus impulsos y termino lastimando a la persona que amaba, por el miedo al rechazo, creyó que hacía lo correcto, que lo cuidaba pero al final solo lo lastimó.
El enojo así mismo hizo que aventara la mesa en un solo golpe, durante mucho tiempo hizo todo para controlar su gran fuerza, pero ahora solo el enojo lo cegaba.
A-Yuan salió de su cuarto al escuchar el gran golpe.
—Padre ¿Que pasó? —cuestionó el chico mirando a su padre que yacía en el suelo cubriendo su rostro con su brazo
—Nada, regresa a tu cuarto —su voz era más fría y seca
—Pero padre...
—He dicho que regreses a tu cuarto
—Esta bien.... ─musitó
Era la primera vez que A-Yuan vio a su padre perder la compostura, nunca se enojaba, nunca estaba triste, siempre parecía está bien, con una leve sonrisa, ahora parecía que todo en él estaba roto, con algo de tristeza se metió a su cuarto, con la preocupación y la duda del porqué su padre estaba así.
Lan XiChen se levantó, caminando con pasos lentos y pesados hasta llegar al librero, donde tomo una caja de madera, saco de su bolsillo una pequeña llave, donde abrió aquella caja, habiendo dentro otra pequeña cajita, la sostuvo en sus manos como si fuera la cosa más preciada de su vida, la abrió para ver los dos anillos, las lágrimas salieron abriéndose paso por sus mejillas.
Se había dicho a si mismo que aunque encontrará de nuevo Jiang Cheng no se acercaría a él, ya que la imagen de verle caer hasta su muerte, estaba clavada en su mente, pero se había comido sus propias palabras, no pudo dejar de acercarse a él, amándolo de nuevo. Ahora ya lo había lastimado y perdido, pero aunque su corazón estuviera hecho pedazos, se decía a si mismo que aquello era lo mejor, cuidaría de su vida desde lejos, sin volverse a cercar.
Los anillos en aquella caja, eran el recuerdo de una promesa hacia si mismo.
Se dejó caer en el suelo sosteniendo aquello cajita, las lágrimas aún fluían.
Su teléfono sonaba, pero estaba tan sumergido en sus propios pensamientos que no lo escucho, se quedó ahí en silencio mirando aquel objeto preciado.
Cuando tienes el corazón rato y el alma fracturada el tiempo pasa de manera lenta.
La puerta de la casa se abrió pero el tampoco lo noto.
Unos pasos apresurado se acercaron a él.
Lan Zhan miro a su hermano y entendió el enojo de Wei Ying, lo que había pasado a los dos les había afectado de manera dolorosa.
—Hermano —pronunció Lan Zhan doblándose para llegar a Lan XiChen
—Lo he lastimado, ahora él me odiara, pero está bien, ¿no?, así podré cuidarle, aunque ya no vuelva a tocarle, pero si es lo correcto, ¿por qué me duele el corazón?, ni las heridas en batallas pueden compararse al dolor que siento en mi corazón —miró a Lan Zhan —Lan Zhan ahora puedo entender el dolor que sentiste cuando lo perdiste, perdóname hermano mio, por ser un ciego y no entender en ese tiempo tu dolor
—No necesitas pedir disculpas, ahora necesitas levantarte, alguien se preocupa por ti, tu hijo, A-Yuan se debe sentir preocupado, las cosas mejorarán, buscaremos las respuestas y te puedo asegurar que todo saldrá bien.
Lan Zhan levantó a su hermano y lo llevo a su habitación para que durmiera, en su larga vida solo 2 veces vio a si a su hermano de esa manera, la primera fue cuando Jin GuangYao lo traicionó, la segunda fue cuando Jiang Cheng murió. Ver a la persona que admiras, respetas y quieres, de esa manera, hacen que el corazón se comprima en el pecho.
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