Extraño // Mo Dao Zu Shi // AU ✔︎

15.- Sentimientos Derramados

Jiang Cheng se sentía aún el efecto del alcohol en su sistema, cuando esté está ebrio siempre habla más de lo normal, es sincero, aunque al día siguiente olvide todo y lo niegue.

Tomo su celular y se dio cuenta que este estaba apagado desde que llegó a la casa de los Lan, así que lo encendió para ver si tenía algún mensaje, pero este vibro de manera repentina, en la pantalla el nombre de XiChen aparecía y en un intento torpe de colgar la llamada la contesto.

—Demonios —pronunció —¿Hola?

—¿Cheng estás bien? —la voz calmada y suave de XiChen entraban por sus odios como veneno llegando a su corazón.

—Lo estoy, ¿por qué? —preguntó a un molesto

—Quería hablar contigo, tenía miedo de que quizá ya no quisieras hablar conmigo... Sobre lo que pasó

—¿Estás casado? ─cuestionó

—No yo no, y... —iba a decir que jamás lo había estado, pero sería otra mentira, pero como explicarle que estuvo casado con él en otra vida, se prometió a sí mismo, que, si Jiang Cheng volvía a su lado, esta vez ya no diría mentiras

—¿Y? —dijo después de un silencio producido

—No te engañaría de esa manera —respondió XiChen volviendo en si

—Ya veo ¿y su madre? —volvió a cuestionar un ebrio Cheng

—Ese niño fue adoptado por mí, no hay madre ─respondió sereno

—Ya veo, no preguntaré más

—¿Aún estás molesto? —preguntó cautelosamente

—Desde que te encontré algo en mi cambio, odio la manera en la que me siento, mi cuerpo me pide a gritos escuchar tu voz, mandar un mensaje y ver tu respuesta puede hacer que un mal día cambie, tu voz calmada, relaja mis sentidos y tú sonrisa me nubla los pensamientos racionales, quiero besarte, —decía sin tapujos —sentir tu cuerpo y pensar que tú no eres un sueño, hoy sentí que la realidad me despertaba y mis miedos rebasaron mis pensamientos, sentía que aquella sonrisa noble solo era un engaño, ¿qué hiciste conmigo Lan XiChen?

—... —un silencio se produjo del otro lado —yo...

—Yo no soy bueno siendo gentil, mi madre tenía un mal carácter, mientras mi padre me enseñaba ser bueno con las personas, mi madre me regañaba por ser débil, hizo en mi un mal carácter, no puedo expresarme bien, me enojo fácilmente, aunque al final me arrepienta mi orgullo hace de mi la peor parte, termino sin disculparme con quién me enojo sin razón, a veces creo firmemente que moriré soltero, que no habrá alguien que me soporte y así lo creí, pero entonces te conocí y el miedo de no ser correspondido fue lo peor —sigue derramando sus sentimientos, el chófer llegó a su destino pero este no dice nada y se baja para dejarlo —sentí que tú y yo ya nos habíamos visto, más cuando pronunciaste mi nombre, mi corazón latió, como si ya te hubiera escuchado llamarme, tenemos pocos días apenas no hemos visto un par de veces y aunque nos hemos escrito mucho, aún siento que te estuve esperando más de una vida —finalizó

—Jiang Cheng yo... Te amo —respondió Xichen quien se encontraba en el sofá de su casa mirando hacia el techo intentando contener todo aquello que su corazón sentía, era un sentimiento agridulce

—Soy un ebrio idiota que quizá mañana olvide lo que he dicho, pero te puedo asegurar que mis sentimientos son claros, que, aunque lo olvide mi mente, mi corazón lo seguirá sintiendo —suspiro para decir —Lan XiChen gracias por encontrarme... Te amo.

────────────────────

Después de ver aquellas imágenes los pensamientos de Wei Ying ya no eran claros, al mirar aquella flauta, giro su vista a hacía sus amigos y los vio en túnicas, gris para Nie, morada para Jiang y negra para él, en un rápido pestañeo todo volvió a normalidad, un sentimiento lo inundo decidió oxigenar su mente caminando a la luz de la luna.

Al final no tomo ni un taxi llegó a su casa caminando, ya para eso solo había pequeños vestigios de alcohol en su sistema. Subió la pequeña escalera para entrar a la puerta de los departamentos alzó la mirada para ver a Lan Zhan parado con los brazos cruzados y los ojos cerrados.

—¿Lan Wanji? ─acercándose a él —¿Que hace usted aquí?, ¿Cómo sabia a dónde vivía?

─En tus papales estaba tu dirección ─respondió un tono calmado como siempre

—Ya veo, pero eso no responde ¿Que hace usted aquí? ─volvió a cuestionar

—No respondías al teléfono, quería saber si habías llegado con bien ─respondió

Wei Ying miró su teléfono y vio las llamadas perdidas, estaba tan sumergido en sus pensamientos que no sintió la vibración de este.

—¿Usted siempre es tan gentil con las personas? —preguntó mirándolo, sus ojos brillaban con el destello de la luna

—No —dijo —solo contigo

Eso hizo que el corazón de Wei Ying se encogiera en su pecho.

—No soy tan especial Lan WangJi —una sonrisa melancólica se formó en el rostro de Wei Ying.

Lan Zhan aún podía ver la figura del patriarca Yiling en el hombre que estaba frente a él, no pudo contener sus sentimientos, quería abrazarle como la última vez que hizo cuando se tuvo que despedir de su amado por segunda vez.

Dio dos pasos y tomo la mano de Wei Ying jalando su cuerpo hacia a él, lo abrazo tan cálidamente que en el rostro de Wei Ying las lágrimas fluyeron sin freno.

—Quizás creas que no eres especial, que te mereces estar solo, pero créeme que para mí tú lo eres todo, aquel torpe chico que siempre llega tarde con mi desayuno, es la alegría de mi día...sin tan solo pudieras verte como yo te veo... —acaricio el cuerpo de Wei Ying como si fuera la cosa más preciada en el mundo.

Si tenía que volver a perderle, al menos que en sus manos quedará en calor de su piel, que su olor quedará impreso en su alma, que al menos pudiera sentir que al final de esta vida sin fin, pudo volver a tocarle, si final él no lo amará de nuevo, sabría que en su cuerpo está en calor de su piel.

─────────────────

¡Gracias por leer!

Makishi Konue