Lan Zhan alcanzo la inmortalidad junto con su hermano, haciendo la promesa de buscar a Wei Ying, pero cuando por fin lo encontró, él jamas lo miro con amor, para él era solo un extraño.
Lan Zhan miro como una y otra vez el amor de su vida lo dejo p...
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Wei Ying subió por las escaleras del hotel, no le importo la cantidad de pisos que tuviera que subir, creía firmemente que sería más fácil que subir por el elevador.
Su corazón latía con fuerza, un frío pasaba por su cuerpo, no es que amara al chico de esa manera, pero era la persona que estuvo a su lado todo el tiempo, quien lo saco de los bares en la madrugada, quien estaba a su lado en las infinitas resacas, curando su cuerpo lastimado, la persona que se quedaba a su lado tomando su mano hasta que por fin cayera en un sueño profundo, la persona que abrazaba su cuerpo, mientras el lloraba todas las noches, la persona que veía a su lado las horribles películas que escogía, con esa cara de molestia, era esa persona que sin importar que tan molesto o idiota fuera, estaría ahí para él, una y otra vez, la persona que golpearía a el idiota que se atreviera a lastimarlo.
Nadie comprendía a Jiang Cheng, pues todos miraba su rostro de enojo y desapruebo, su manera de actuar y decir las cosas, pero nadie podía ver qué él era un chico que no tuvo las cosas fácil y sin embargo podrías contar con él siempre.
Wei Ying lo amo, pero aquel amor no era de la manera en la que veía Lan Zhan, esa amor era más de amistad, el amor a un hermano que no deseas que nadie lo lastime.
Abrió la puerta de golpe, sin tocar nada para ver aquella escena.
El cuarto estaba completamente destruido, como si una tormenta hubiera pasado por ahí, en la oscuridad, en una esquina estaba Jiang Cheng, quien tenía las manos llenan de sangre por haber roto el espejo con su manos descubiertas.
Wei Ying no pregunto nada, no dijo nada, camino lentamente y envolvió su cuerpo como si fuera un pequeño bebé y dijo con voz suave —estoy aquí
Jiang Cheng dejo salir un aullido de dolor, su cuerpo se desmoronó en los brazos de Wei Ying.
—Me duele el corazón, ya no quiero sentir este dolor, ya no quiero ─musitó
Su voz se quebraba con cada palabra, Wei Ying sentía que era su propio corazón que se rompía.
—Esta bien, lo sé, salgamos de aquí ─respondió
Levantó el cuerpo de Jiang Cheng apoyándolo en su cuello, caminaron sin antes llegar a la recepción.
—Cargue todo lo destruido a mi tarjeta —dejo la tarjeta Wei Ying y salió con Jiang Cheng.
Si bien no tenía dinero, tenía algunos ahorros que servirían para pagar los daños, después haría que él idiota que le rompió el corazón a Jiang Cheng, le pagará eso y más.
Llegaron al departamento de Wei Ying , quitó la ropa con cuidado de Jiang Cheng y lo metió en la bañera abriendo el agua caliente, nunca habían tenido sexo, pero ya conocían sus cuerpos y Wei Ying no lo miraba de esa manera, ahora solo quería ayudarle, porqué su propio corazón era el que le dolía.
