Capítulo 28

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Llegué a mi casa, apenas sosteniendo mi propio peso, siento un enorme dolor en el pecho, un nudo espantoso en la garganta, estoy reprimiendo mis lágrimas, mis piernas tiemblan y apenas pueden caminar.

Mi madre estaba en la cocina y me vió pasar. Arrugué el cartel y lo arrojé por ahí.

Lucía: ¿Daniel..? Oye, Daniel ¿Qué pasó? ¿Qué te dijo?

- Nada, mamá. Déjame tranquilo

Lucía: A ver, ven...

- ¡¡Que me dejes en paz!! ¿¡No entiendes!?

Lucía: . . .

Rompí en llanto y me fuí sollozando a tumbar en mi cama. Entre más tiempo pasa, más me cuesta trabajo creer en lo que vi... ¡Y lo vi con mis propios ojos!

Estuve así un buen rato, todo el tiempo con dolor en el pecho

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Estuve así un buen rato, todo el tiempo con dolor en el pecho. Cada vez que recordaba ese momento, me brotaban más y más lágrimas. Me quedé dormido, no sé por cuánto tiempo.

Cuando desperté, ya se estaba haciendo tarde, vi la hora y descubrí que sólo había dormido una hora, me acordé de lo que había sucedido y me llené de tristeza. En verdad me cuesta más trabajo creer lo que pasó conforme pasaba más tiempo.

Entonces apareció mi padre.

Alonso: Daniel.

- ¿Qué?

Alonso: Te hablan allá afuera. Ya deja de llorar.

Me sequé las lágrimas como pude y me levanté no queriendo. Salí por mi puerta y eran Miranda, Hilce y Lilí.
Se veían bastante preocupadas e intrigadas por la escena que había hecho en el parque.

Miranda: ¿Dani, qué pasó?

Hilce: ¿Por qué no llegaste con Jazmín?

- ¿Por qué no le preguntas a tu noviecito?

Hilce: ¿Ah?

Miranda: Daniel... ¿Qué estás diciendo?

- . . .

Lilí: Vamos, amigo... Dinos qué ocurrió

- Hace poco, alrededor de un mes, traje a Oscar a que conociera a Jazmín. Eso me emocionaba, pues era mi mejor amigo conociendo a la niña que amaba y considerando que les hablaba a uno del otro muy seguido, consideré que era una excelente idea. Se llevaron bien

Hilce: Daniel...

- ¡Y ahora veo que se llevan BASTANTE BIEN..!

Miranda: Dani ¿Qué ocurrió?

- . . . Encontré a Oscar besándose con Jazmín

Miranda: ¿¡Qué..!?

- Y después de eso, subieron a su departamento bastante entusiasmados. Y considerando que tú estabas conmigo y tu madre estaba trabajando...

INVIERNO DE SILENCIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora