El Perfeccionista [Park Jimin]

♠•Capítulo 27•♠

Es muy difícil sobrevivir en este mundo...es muy difícil sobrellevar una desgracia que se derrama sobre ti, pero cuando se tiene el cariño de una familia o siquiera de alguien, el sufrimiento y el dolor disminuyen...van desapareciendo hasta que solo quedan recuerdos de ellos...

—¿Y cómo estuvieron las cosas por aquí? —la morena deslizó los brazos alrededor del cuello de su pareja quien la sostenía por la cintura.

—Dificiles...—besó la frente de su chica y nuevamente la miró a los ojos —Si no estás a mi lado, todo me parece muy difícil...sufrí en tu ausencia, te necesito para respirar.
—con delicadeza le besó el cuello a la vez que esnifó la misma zona.

Ella sonrió ampliamente ante sus palabras —¡Oh! ¿En qué momento te volviste un romántico empedernido, Park?

—En el momento en que me di cuenta que te amo...que eres mi vida y que quiero tenerte en ella —susurró en su oreja.

La morena le acarició el rostro y sin más, lo besó con una sublime dulzura al igual que cariño. Jimin la atrajo más hacia su cuerpo, pues necesitaba, anhelaba volver a sentir a su amada.
Habían transcurrido un largo tiempo que no tenían intimidad, en el sentido de estar solos para hablar, conocerse más, pasar tiempo juntos como una pareja normal lo haría.

—Lamento mucho lo de tu padre —soltó de repente.

Ella simplemente no dijo nada y él, entendió perfectamente su silencio. Por supuesto que no es nada fácil sobrellevar el hecho de que tu padre murió, para nada es sencillo llevar el horrible dolor de su muerte en tu corazón. Jimin sabía que su chica emocionalmente se encontraba muy mal y quería ayudarla para que su dolor aminorara.

—¿Te apetece algo de cenar? —el chico le besó los nudillos de su pequeña mano a lo que ella rápidamente negó.
—Entonces...quizá un masaje del gran Park Jimin...

—Tentador...pero no —se acurrucó en su pecho.

—¿Entonces?...¿Guapa, qué puedo hacer para relajarte? —levantó una de sus sexis cejas.

—Lo único que quiero y deseo ahora es que me hagas el amor, Park.

Los ojos del chico brillaron con suma intensidad. Hacer el amor...esas palabras aun eran nuevas para él, antes esas sencillas palabras le parecían absurdas y dramáticas, sin embargo ahora le suenan tan especiales, sobre todo porque aquellas palabras las comparte con TN, su bella latina.

Sin esperar un segundo más la tomó por la cintura elevándola en el aire ligeramente como una pluma delicada. Ella enrolló sus piernas en la cintura de su chico y se estremeció al ver los expresivos ojos que éste tenía, con tan solo su forma de mirarla la hacía despegar los pies de la tierra e irse a una inmensidad en donde solo existe la felicidad, el placer y por supuesto el amor sincero.

—Eres la mujer más auténtica, sencilla y real que he conocido...para mi eres muy especial. —rosó suavemente sus narices para darse un dulce beso de esquimal. —Te quiero, TN

—Tú eres el chico más complicado que he conocido en toda mi vida —
Ambos rieron por el comentario de ella —Pero también eres muy talentoso, determinado...alguien quien se aferra a lo que quiere, te admiro y...te quiero...te quiero mucho Jimin...mi Jimin —selló los labios de su novio con un dulce y fugaz beso.