BOYFRIEND ✧ HERMIONE GRANGER

xiv. todavía

Asher quiso irse de la sala de trofeos apenas vio a Pansy Parkison. Esperaba que el profesor Snape se encargará de darle un castigo a Parkison pero al parecer McGonagall decidió castigarlos a los dos juntos. No tenía idea por qué a Minnie le parecía una buena idea dejarlos a los dos solos en una habitación luego de que tuvieran un duelo en medio de los pasillos. Todavía se lamentaba que el hechizo calvorio le diera a Daphne Greengrass en vez de a Pansy.

El motivo del duelo fue que Asher había escuchado a Parkison junto con otras chicas de Slytherin hablar mal de Hermione. Potter reaccionó, como siempre, sacando su varita y Pansy no se quedó atrás. Llamaron tanto la atención que se formó un círculo alrededor de ellos y varios comenzaron apostar quién saldría ganador. Lamentablemente la pelea no llegó a tener ningún ganador por la aparición de la profesora de Transformación. En ese momento Asher se había puesto pálido, casi como una hoja de papel, no porque le temiera a McGonagall, sabía que era su alumno favorito aunque lo negará, si no porque ella le advirtió que si volvía a encontrarlo peleando en los pasillos le mandaría una lechuza a su mamá. Y la señora Potter si le tenía miedo. Elle podía apoyar que le hiciera bromas al profesor Snape pero no iba a tolerar que tuviera un duelo en los pasillos casi todos los días.

—Buenas tardes, señor Potter—dijo la profesora dándose cuenta que se quería escapar—. Le estaba diciendo a la señorita Parkison que tendrán que limpiar todos los trofeos sin magia.

Una mueca apareció en el rostro del joven al repasar la sala. Se suponía que los trofeos no deberían estar tan sucios ya que meses atrás Harry y Ron sufrieron el mismo castigo.

—Sus varitas, por favor—pidió la jefa de Gryffindor. Ambos adolescentes se la entregaron de mala gana—. Esperó que no rompan nada. Vendré dentro de  una hora—avisó antes de retirarse.

Asher tomó una de las cubetas junto con un trapo para después ponerse a limpiar. La tarea que tenía no era muy complicada, además no era la primera vez que le daban ese tipo de castigos. En una ocasión tuvo que limpiar todos los calderos bajo la supervisión de Snape.

El problema con el castigo no era que no le dejarán usar magia, podría sobrevivir un par de horas sin ella, si no que conocía a Parkison y sabía que ella no podría estar dos horas callada. Estaba seguro que tarde o temprano terminaría molestandolo con algún comentario. Ella no podía mantener su boca cerrada.

Los primeros cuarenta y cinco minutos se la pasó escuchando a la Slytherin quejándose sobre como su manicura terminaría arruinada, lo cual le hizo gracia pero su diversión terminó en el momento en que Pansy le preguntó:

—¿Qué le ves a Granger?

Asher notó que el tono de voz de Parkison no era burlón, como la mayoría de las veces, mas bien parecía tener curiosidad. Eso llamó su atención a tal punto que dejó de limpiar los trofeos.

—¿Por qué te importa?—hizo una pausa—. ¡No me digas! ¿Molestas a Hermione sólo porque gustas de mi?

Potter no supo si fue su imaginación pero por un momento le pareció escuchar a la chica reírse.