Capítulo 51

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Narra Tzuyu

Había pasado un mes desde que estaba en la universidad y para mi sorpresa todo iba bien, de a poco se sentía como si no doliera de la misma forma, pero dolía. Ya no soñaba todas las noches con ella, pero creía que era el efecto de las pastillas para dormir que ocupaba de vez en cuando. Ya no la pensaba como antes, pero lo hacía, sabía que todo había bajado de intensidad, pero cada vez que trataba de decirme a mí misma "Ya no la amo como antes" una punzada en el centro de mi corazón me recordaba que me mentía.

He hecho algunos amigos, aparte de Yerim que era así como mi mejor amiga en la universidad, era con la que, hacia las compras, íbamos a fiestas juntas y todas esas cosas que hacen las amigas. Era bastante cómodo estar a su lado; Yerim no le costó mucho encontrar novia, de hecho, cuando decidió que no quería estar en la carrera de artes y pinturas dijo que estudiaría música me sorprendí mucho. Le pregunté porque estaba haciendo esto cuando se supone que toda su vida había querido dedicarse a la pintura y ella solo me dijo "A veces no es mala idea tratar con algo en que no eres tan bueno", creo que si pudiera tatuarme una frase sería esa.

Yerim entró a estudiar y conoció a dos chicas; una de ellas se llama Seulgi y la otra Nayeon. En nuestro grupo también esta Irene junto con una de sus amigas del club de deporte, Seungwan, también la novia de Yerim, se llama Sooyoung son un amor juntas, a veces cuando las veía besándose o abrazándose me hacían recordar a Sana pero el recuerdo iba y venía.

- ¿Hoy vienen tus amigas por fin verdad? – me preguntó Yerim mientras almorzábamos.

-Si, por fin – las chicas habían tratado de venir desde esa vez que hablamos por teléfono, pero Shuhua me contó que Sana estaba en modo exigente de mierda y no habían tenido ni un fin de semana libre, hasta hoy – las extraño demasiado.

- ¿Dónde irán? – preguntó Sooyoung dándole la comida en la boca a Yerim.

-No sé, supongo que iremos a las afuera del campus.

-Llévalas a ese café nuevo que abrió.

-En eso mismo estaba pensando – en ese momento Miyeon llegó a sentarse con nosotras – Hola – la saludé con un beso en la mejilla.

- ¿Cómo están? – Miyeon estudiaba literatura así que venía cargada de libros.

-Bien y ¿Todos esos libros? – pregunto Seulgi.

-Tengo examen el lunes – me quedo mirando - ¿Cómo haz estado?

-Muy bien gracias – Miyeon había sido mi compañera de almuerzos, cenas, compras, de ir a comer helado y el cine. Hacíamos cosas diferentes a lo que hacía con Yerim y Sooyoung y creo que era porque en el fondo yo sabía que aún le gustaba – Hoy vienen las chicas.

-Me alegro mucho – Miyeon tomó mi mano, hace unos días después de salir de una obra de teatro pasamos a un bar a beber, ahí me dijo que aún le gustaba, que me encontraba demasiado guapa pero que no intentaría nada conmigo sin que yo no estuviera segura; había sido muy respetuosa y tendría que ser una estúpida para no darme cuenta que es hermosa, pero había algo que no me dejaba del todo tranquila con ella y antes de descubrir que es no tenía pensando hacer nada, aparte, aún la amo, y no podría estar con otra persona si sigo pensando en Sana, no se lo merece.

-Creo que iré a buscarlas – me levanté de la mesa – Nos vemos.

-Adiós idiota – me dijo Yerim justo cuando prendía un cigarro.

-Adiós enana.

Mi forma de vestir había cambiado en este tiempo, ya no me vestía con ropas anchas; ahora era todo lo contrario. Me vestía con pantalones ajustados, poleras ajustadas, chaquetas de cuero, a veces abrigos y lo único ancho que tenía eran unos polerones que de vez en cuando ocupaba. No faltaba mi chaqueta de cuero. Sabía que cuando las chicas me vieran se llevarían una a lo mejor no tan agradable sorpresa.

Sessions Of Love (Satzu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora