—¿Esa es tu manera de vengarte?¿Utilizando al novio de tu mejor amigo?¿Porque no puedes dejarlo pasar?
—Si viniste a regañarme,lo mejor sería que te retires.
—No se en qué te convertiste,pero está no eres tu.
—Adios,alya.
—Piensa en el daño que le haces a tu hija y en como afectará en su vida. —cerro la puerta de un portazo.
Le conté a alya lo que estaba planeando,pero se lo tomó bastante mal. Se lo que estoy haciendo,lo estoy manejando bien. Además,¿Cómo quiere que olvidé? Una infidelidad no se puede olvidar de un día para otro más si la persona que más amas lo ha hecho,no es fácil.
—Llevare a Amelia al parque,¿Irás o te debes ver con tu amante? —me llego justo.
—No iré a verme con nadie,ni siquiera estando con Amelia,no soy como tu Adrien. Podré tener un amante pero nunca dejaré a mí hija de lado. —subi a la habitación a vestirme,estamos en invierno.
Tome mí bolso y salí,cuando baje a la sala Adrien y mí hija se encontraban bien cubiertos.
—¡Vamos mami! —tomo mí mano y me llevo corriendo a la salida,hasta que sentí un agarre en mí muñeca.— ¡Papi! —dijo mí pequeña alargando la "i" con un puchero.
—Ve llendo al auto cariño,iremos enseguida. —asintio,luego mire a Adrien que estaba buscando algo en el cajón de las bufandas.
—¿Que estás haciendo? —pregunte confundida cuando se acercaba a mí.
—No estás llendo como se debe,te vas a resfriar. —envolvio la bufanda en mí cuello brindandome calor luego me coloco los guantes.
—No tienes que hacerlo...yo sola puedo. —dije en un susurro apenas audible,pero creo que escucho.
—No me molesta,no quiero que te suceda nada. —senti mis mejillas arder,me di vuelta para volver con mí hija y entrar al coche. Cuando llegamos al parque,empezó a nevar y Amelia salió disparada. Yo solo la mire.
—Es increíble que a pesar de todo sonría. —hablo mirando a Amelia que jugaba y tiraba nieve.
—Si,no hagamos notar más esto...no le hará bien saber que sus padres están por separarse. —se levanto bruscamente,me tomo de la muñeca y con un brazo sujeto mí cintura— ¿Que..—el sonrió pícaramente.
—¿No crees que es mejor demostrar que aún nos amamos? —se empezó a acercar a mí,hasta que sentí su respiración en mis labios.— me gustas,como la primera vez que te vi.
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Aún con los ojos cerrados,rodee su cuello con mis brazos acercándolo más a mí.
—¡Mami! —me separe de el bruscamente y mire a mí hija— yo soy la única que puede darle besos a mí mami. —me extendió sus brazos y yo la cargue para que después con sus pequeñas manos tomara mí rostro y me diera un pequeño beso por lo que sonreí.
