Cinco años despues.Me desperté sobresaltada en la sala de mi casa, la fina línea de sudor empapaba todo a su paso y mis sentidos estaban al máximo. Me senté en el sofá para tratar de controlar mi respiración. Me dolía el pecho del rápido frenesí de mi corazón.
-Otra vez esa pesadilla, ¿Porqué no puedo soñar con chicos lindos montados en ponis?-susurré con algo de molestia y melancolía.
Está bien eso puede parecer extraño a mis diecinueve años pero que esperan, llevó sobreviviendo sola desde mis quince años, tuve que aprender a tener sentido del humor, aparte soy relativamente joven y pese a no ser licantropo, al menos no del todo, tengo mucha fuerza, y mis sentidos son cómo los de un lobo, o al menos eso creo.
Gracias a la diosa luna no me fue tan mal después de que fui desterrada, anduve sin rumbo de ciudad en ciudad hasta que hice una amiga que se compadeció de mí y me dejo vivir en su casa, Susan es una chica rara, su familia tiene una gran fortuna debido a su empresa y bueno ella puede hacer lo que le plazca siempre y cuando no manche el nombre familiar.
Siento como la puerta principal se abre golpeando la pared súper fuerte y mi amiga entra muy efusivamente.
-¡Allison, maldita perra, al fin despertaste, ya me testaba preguntando si moriste o algo asi!- Susi gritaba mientras hacía su entrada triunfal.
-Cuanto amor recibo esta mañana.- digo suspirando con ironía, ella solo pega una carcajada que me aturde, y por fortuna lo supe disimular.
-Yo también te extrañé Allis.- dice mi amiga con una sonrisa de oreja a oreja, que si les soy sincera, da algo de miedo.
-¿Qué tal tus vacaciones? ¿Qué raro que no te olvidaste de mi? Y por cierto ¿Qué haces en mi departamento?- solté una tanda de preguntas mientras salía del trance somnoliento en el que me encontraba junto con el mal estar mental en el que me encontraba frutos de mi mal sueño.
-Wow, wow, wow, alto ahí vaquera, son muchas preguntas ¿Qué es esto? ¿Un interrogatorio?- pregunta con su típica cara de fastidió falsa y su forma tan altanera, típica de su autoestima.
Me rió negando con la cabeza, ella nunca va a cambiar. Y siendo franca, esperaba que jamás lo hiciera.
-¿Me vas a contestar? ¿ O tengo que ignorarte para que me lo digas?- Dije mientras sonreía con malicia. No pasa ni medió segundo cuando ella viene corriendo hacia mí tirando su cuerpo sobre el mío para hacerme cosquillas.
-¡Ah no, ni se te ocurra a hacer eso!- todo su peso estaba sobre mi quitándome el oxígeno.
-Pa-para para Susi no pu-puedo respirar.- mis pulmones quemaban y mis mejillas dolían.
Se empezó a reír y se tiró a mi lado en el sofá, recostadas me miró sonriendo y yo le devolví la mirada, esa que si pudiera te mataría, mientras recuperaba el aliento.
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Allison y el Alfa
WerewolfTodo comenzó esa noche de lluvia en donde por ver algo que no debía fui desterrada de mi manada, ese lugar que fue mi hogar de pequeña, donde fui rechazada por mi mate por ser una simple humana, en donde mi familia me dio la espalda y mi hermana se...