Capítulo 7

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Estaba furioso, Me encontraba parado frente a diez hombres que están a cargo de mi beta

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Estaba furioso, Me encontraba parado frente a diez hombres que están a cargo de mi beta .
Edward me acaba de informar que sus hombres todavía no encontraron ningún rastro de ella, es como si se hubiera desvanecido en el aire... Pero eso es imposible.

-¿Cómo es posible que no puedan encontrar a una niña?-Pregunté con sorna.

Mire a los lobos que llegaron de terminar de buscar en algunas de las ciudades, todos bajaron la vista; sabían que estaba cabreado.

-No lo sabemos señor, es como si hubiera desaparecido.

Frustración, eso es lo que tenía en estos momentos, también estoy cargado de ira porque yo la había cagado desde el principio.

Mire a los demás, y se me ocurrió una idea.

- Busquen bien, Tienen que investigar en lugares públicos y revisar registros de chicas que se llamen Allison Stone.

-Si, señor.

Mire a mi beta y me quedé pensativo debido a su aspecto, estaba demacrado.

-Y una cosa más...-Me miró con curiosidad.

- Ve a descansar.- Divise como mi amigo levantó un ceja y me examinó.

- ¿Estás bien?

- Esto no es una broma, si estás fatigado no me sirves, puedes cometer un error y eso puede ser peligroso.

- Pero, si no me quedo despierto no puedo estar al tanto de sus notificaciones.

Lo miro con enojo, es mi amigo y lo quiero, pero que se encuentre en ese estado no es sano, soy el Alfa de esta manada si no cuido a mi manada los pondré en peligro.

- Es una orden, ve a descansar. Luego podrás notificarme.

-Como ordene,señor.

-Ahora largo.

Escuche como todos salían de mi despacho y cerraban la puerta. Suspire y mire por la ventana.

-¿A donde estas Allison?-susurre.

Me quedé pensando en las probabilidades de encontrarla que tenía cuándo el sonido de mi móvil me saca de mi burbuja. Agarró el móvil y veo que el remitente es desconocido, me quedo estático y contestó.

- Black.

-¿Pero que paso cariño? - La voz melosa del otro lado de la línea me dio escalofríos y me tense de inmediato, ¿Cómo se atreve a llamarme cariño después de lo que hizo?

- ¿Que mierda quieres?- Ya bastantes problemas tenía como para que aparezca ella a cagarla más.

- ¿Es así como tratas a una dama?-Su voz me molestaba muchísimo y el que este llamandome como si no hubiese hecho nada solo me irritaba.

-Dejaste de ser una dama para mi.- Escuché esa risita maliciosa que la caracterizaba mucho.

-¿Sigues enojado por eso? Vamos superalo, fue hace año y medio.- Apreté más el móvil a mi oreja y cerre el puño de mi mano libre para intentar controlar mi mal genio.

-¿Cómo conseguiste este número?

-Tengo mis truquitos bajo la manga.- Gruñi. Mi paciencia se estaba acabando y ella lo sabía muy bien.

- ¿Que quieres?

- Uhhh que frío, me gusta.

- ¿Puedes ir al maldito grano? Tu lengua venenosa me esta cansando.

- ¿No puedo llamar a un viejo amigo?

- Ambos sabemos que no me estás llamando por placer, asi que ve al puto punto o cortare la maldita llamada.- Mi tono de voz se fue levantando a medida que cada palabra abandonada mi garganta, mi enojo se iba incrementando como si estuvieran tirando gasolina al fuego.

-¡Vaya!¡vaya! pero que tenemos aquí, un Alfa en plena ira, pero que interesante. Pude escuchar otra risa maliciosa, la muy zorra estaba disfrutando sacarme de mis casillas. Y no le iba a dar más ese gusto.

- Bueno, cómo no tienes nada interesante que decirme me voy, tengo cosas mucho más importantes como para que me andes molestando.

- ¿Quien dijo que no es interesante lo que te tengo que decir?

No se a lo que está jugando pero no caere en su sucio juego, sea lo que sea que éste planeando lo ignoraria.

-Agradecería que no vuelvas a llamar.

Iba a cortar cuando lo que escuché me dejó helado, así que me quede escuchando todo lo que me decia con suma atención; cuando termino mi ira estaba al máximo.

-¡LE LLEGAS A TOCAR UN PELO Y TE MATO! ¿ME ENTENDISTE? ¡NO ESTOY JUGANDO!

- Eso ya lo veremos, cariño. - A través de la línea se escuchó un sonoro Muak y cortó, su beso me dio asco.

Estoy muy cabreado, no podía calmar mi enojo así que avente mi móvil contra la pared destruyendolo. Sus diferentes partes revotaron contra la pared y se esparcieron por el suelo. Fue en ese momento donde necesité liberar mi irá, y eso hice.

Después de un par de horas mi despacho estaba hecho un desastre.

Los sillones todos desgarrados al igual que los tapices y cuadros; los jarrones estaban hechos pedazos mojando con su contenido la alfombra; los muebles estaban astillados y rotos.
Me senté recostando la espalda en la pared que está paralela a la que tiene la ventana. Asi pase toda mi noche, enojado con el impulso de tirar toda la casa por la ventana, lanzando maldiciones y gruñidos.

¿Cómo es posible que lo supiera? Si la operación era secreta, solo hombres de confianza fueron asignados a la misión.

Una sarta más de maldiciones salieron de mi boca, para caer en el destrozado despacho.

-Maldita sea Allison, te encontraré.

Pase el tiempo que pase te encontraré y no te podrás ir de mi lado, no me importa lo escurridiza que seas... Se que es imposible que hayas desaparecido.

Allison y el AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora