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Maratón 2/2

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PIANO
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           PROBABLEMENTE ESTO SONARÍA EXTRAÑO, pero el auto de Alice olía realmente bien

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           PROBABLEMENTE ESTO SONARÍA EXTRAÑO, pero el auto de Alice olía realmente bien.

—¿Cómo te sientes?—me pregunta sin dejar de mirar la carretera.

—Más que nada un poco nerviosa, si te soy sincera.—confieso, ella ríe.

—No te preocupes, no mordemos, a menos que quieras, en ese caso creo que Edward estaría encantado.—bromea.

Esbozo una sonrisa mientras niego ante su actitud, aún con este sentimiento cálido en el pecho, no puedo sacar la ansiedad de mi.

—Si quisieran morderme se envenenarían, la sangre de súcubo es letal, incluso si solo la tocasen.—le explico y ella ríe.

—Ya, entendido.—dice entre risas.

Cuando hemos llegado a su casa, estaciona el auto frente a ésta y no puedo evitar pensar en lo lujosa y hermosa que luce por fuera, no quería ni imaginarme qué tal estaría por dentro.

—¡Vamos!—exclama mientras me toma del brazo y me jala hacia adentro de su casa.

Puedo ver a toda la familia reunida en la sala, mirando hacia la puerta, como si estuvieran esperándome.

—Debo decir que es todo un placer conocerlos oficialmente, familia Cullen.—digo con una sonrisa.

Escucho a Emmett soltar una sonora carcajada.

—¡Oh, vamos! ¡No actúes como si no nos conocieras!—dice y se abalanza a abrazarme con sus gigantes brazos.

—En realidad, se lo decía a tus padres, Emmett.—me burlo cuando me ha soltado y veo que hace una exagerada mueca de dolor. Miro a la extraordinaria pareja del Doctor Cullen y a su mujer con una sonrisa.—Mi nombre es-

Su esposa me interrumpe, sin embargo, no me enfado.

—Sasha Blake, lo sabemos, Alice, Emmett y Edward no paran de hablar de ti.—dice con un tono tan dulce que no puedo evitar pensar en lo tierna que luce a un lado de Emmett, quien es mucho más alto.

—Espero que cosas buenas.—susurro.

El rubio toma a su esposa de la cintura y me sonríe con calidez.

—Las mejores.—dice.

Agudizo mi olfato y sonrío.

—¿Cocina italiana?—pregunto con emoción y noto como todos asienten.—¿Necesitan ayuda? La cocina no se me da nada mal.

—Oh, querida, eres nuestra invitada, es lo último que te pediría hacer.—me dice Esme con su tierna voz.

Niego.

Succubus.|Edward Cullen [𝟏𝟖+] [SBN #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora