Settle Down [Troyler]

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Martes 16 de diciembre: «no creo estar preparado para volverte a ver.»

Miércoles 17 de diciembre: «Finge sólo una vez, por los buenos tiempos y por supuesto por los fans xx»

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Troye.

¿Cuánto tiempo ha pasado ya? ¿3 meses o 4? No importa. Sigo sintiéndome la más grande porquería de ser humano en esta galaxia. Y lo digo en serio. Jodí todo... Desde mi relación con Ty hasta mi relación con mis amigos, y no sé como arreglarlo.
Me gustaría que existiera una máquina del tiempo que me regresara a ese momento para darme cuenta de que Tyler tenía miedo y que sabía muy bien que las cosas no serían todas color de rosa; y aún así podría haberlo abrazado lo más fuerte que pudiera y le podría haber dicho que a pesar de todo estaríamos bien en algún punto de nuestras vidas. Pero no. Troye Sivan Mellet siempre ha querido sentirse el centro del universo y no quiere más que toda la atención sobre él.

—Maldita sea, Ky. Lo extraño demasiado.

—Él quería una oportunidad más y tu se la negaste... no es justo eso, Troye.

—Lo sé, y de verdad que me arrepiento demasiado por eso... Estaba tan ciego por mis malditas inseguridades que pensaba que era mejor dejarlo así, pero obviamente no funcionó.

—¿Cómo crees que reaccione? —pregunta ella levantándose de la cama.

—Ni idea. Pero por lo que veo en su mensaje no será una buena reacción.

—Quisiera ir contigo y que cuando se vieran te obligara a decirle que lo sientes mucho, sin importar como sea su reacción.

—¿Por qué tuve que joderlo todo? —Paso mi mano por mi cabello y cierro los ojos para encerrarme en mis pensamientos donde todo es felicidad.

—Por el miedo, supongo. Todos llegan a sentirlo cuando encuentras a ese alguien especial... Porque tienes miedo de perderlo, tienes miedo de que no funcione como tu pensabas que sería y tienes miedo al dejarlo ir. —Puedo sentir como se vuelve a recostar en mi cama.

—Amo tanto tus palabras, Ky. Siempre son tan ciertas y filosóficas que no puedo creer que yo sea tu amigo.

—No digas eso, eres mi mejor amigo y también has tenido tus momentos filosóficos que me han ayudado a mi —responde acurrucandose a mi lado.

—Te quiero mucho, Kayla —digo mientras acaricio su cabello.

—Yo a ti, Troye.

Hay un pequeño silencio armónico hasta que ella vuelve a hablar.

—Cuando lo veas, dile cuanto lo quieres.

—Ni en sueños, seguro y no me habla jamás aunque estemos en el mismo lugar.

—Nada pierdes, si ya ni te habla.

—Gracias por el apoyo, eh.

—Oh vamos, sabes que quieres decirle eso y mucho más.

—Sí, es verdad, me muero por decírselo... Pero tuve mi momento y no lo hice, ahora me toca enfrentar las consecuencias.

—Sólo recuerda que él también estará sufriendo, y no hay nada mejor que unas palabras de aliento y muy románticas... Si tú lo jodiste, tú lo arreglas.

—No me convenzas de algo de lo que me pueda arrepentir de nuevo. Suficiente tuve con ser una porquería y no contestarle los mensajes.

—Pero él también dijo palabras incorrectas, te rechazó de manera inconsciente y eso estuvo mal.