Settle Down [Troyler]

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Troye.

Aunque Tyler me haya dicho que no llevara una maleta llena no puedo evitar meter cosas de mas, es una costumbre muy mala mía el empacar cosas que no me van a servir, como por ejemplo más de cinco pares de calcetines cuando sólo nos vamos a quedar tres días allá, pero más vale prevenir ¿no?
Aunque es un viaje «rápido» no puedo dejar de emocionarme, ya que visitaré mi futura casa... Bueno, falta la aprobación de mis padres, pero si pudiera podría irme sin consultárselos porque ya soy un adulto, más bien, ya soy mayor de edad. De todas maneras me gustaría mucho escuchar sus opiniones, los pros y los demasiados contras que se les ocurra en ese momento, más sabiendo que me iré a vivir con Tyler Oakley.
Eso sigue sonando como un sueño. Vivir con Tyler es un sueño. Tener una casa que compartir con Tyler es un sueño. Lo que me saca de ese sueño es que desde el primer momento en que nos instalemos en ese lugar tendremos que ser «cautelosos y cuidadosos» en todo lo que hagamos. En ocasiones quisiera no ser famoso, pero recuerdo todo lo bueno que me ha pasado gracias a eso y me dan ganas de seguir haciendo lo que hago.

Como decía, no sé como sacar el tema y contarles a mis padres el plan de vida nuevo que tengo, me da pánico perder la comunicación con ellos si es que llegan a negarse a que yo me vaya de esa manera, también tengo pánico a que desprecien a Tyler por ser el que dio ese gran paso en la relación, pero seamos sinceros, tarde o temprano tendría que pasar, más cuando los dos sentimos lo mismo y desde hace ya tanto tiempo.
A la única persona a la que le he contado lo que sucederá es Kayla. Se ha mudado ya a la capital pero eso no me impide llamarla cada dos días o enviarle mensajes de texto, es mi mejor amiga, así que puedo hablar con ella de cualquier cosa y sé que ella me apoyará y aconsejará sin juzgarme demasiado. Tal y como pasó cuando le conté sobre la casa y Londres. Al principio comenzó a sermonearme de que era muy pronto para hacer eso, que tendría que esperar más tiempo para pensarlo bien, pero después me dijo que si yo iba a ser feliz así y que era lo que yo más quería en el momento que lo hiciera porque sólo podría presentarse esa situación una vez en mi vida. Le agradecí por todo y terminé llorando porque así sería menos probable que nos viéramos algún día y me regañó diciendo que no fuera tonto, que a pesar de la enorme distancia que nos separaría seguiríamos siendo mejores amigos y que ella me seguiría queriendo por toda la eternidad.
Ahora tengo pensado decirle a Tyde. No a Sage, no a Steele, a Tyde. No quiero que nuestra muy buena relación de hermanos se derrumbe de nuevo por mantener en secreto algo que tarde o temprano se sabrá, pero sé que si le digo a él tendré que decirle a los demás antes de lo que planeo. Que difícil. Seguro para Tyler será fácil decirle a su madre y hermanos que se mudará a Londres conmigo, y es por el hecho de que él ya vive sólo y es independiente.

—¿Cuándo te vas, hijo? —Mi madre toca la puerta y entra.

—¿Eh? Ah, pasado mañana —le sonrío y cierro mi maleta.

—Por tres días nada más, ¿verdad?

—Sí, mamá. Te lo he dicho como diez veces el día de hoy.

—Bueno, perdón. Las cosas se me están olvidando últimamente.

—No te preocupes, mamá —le sonrío de nuevo y me siento en la cama, ella sigue recargada en el marco de la puerta.

—Te dejaré seguir empacando, voy a preparar la cena.

—Está bien, ¿Tyde aún no regresa?

—Am, no. Le diré que venga cuando llegue... No sé porque tanta prisa para hablar con él.

—Cosas de... Youtube. Ya sabes.

—Si, claro... bueno, ¿puré o ensalada?

—Ensalada. —Sonríe y sale de la habitación cerrando la puerta.