Capitulo 5: Nada puede salir mal...

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Narra Carlo:

Dicho y hecho, Armando sale del salón dejando con cierta incertidumbre a los alumnos presentes por las preguntas que el oficial les hará al pobre David el cual debería de estar olvidando ese momento. Aunque algunos decían que el se lo merece por esto y lo otro, para Fin y Carlo decían absolutamente lo contrario y que simplemente corrió con mala suerte, Mientras que otros decían el típico "hubiese sido yo" o "Si lo veo juro que lo reviento".

Pero en fin, los alumnos salieron del aura y Fin y Carlo fueron de inmediato buscaron a Juliana -la cual estudiaba en el curso de al lado- para contarle la terrible noticia.

-Holaaa- saludaba desde lejitos al duo de jóvenes

- Hola- decía Carlo  acercándose a ella para saludarla de beso

-¿Qué me cuentas?-Decía Fin repitiendo la acción de su amigo

-Un poco asustada por lo que dijo la policía- se encogía de hombros- ¿A ustedes si les dijeron a quién casi mataron?

- A David- Fruncía el ceño Fin

-¿David David?- confundida se tocaba las puntas de su pelo

-Nuestro David- respondía Carlo

-No...-Se le ponían los ojos llorosos a Juliana- Imposible.

-Pues tendrás que creerlo, esta hospitalizado cerca de la escuela- decía Fin

-Esperó que este bien, no quisiera que le pasase nada- Juliana con voz llorosa se acercaba a Carlo- ¿Me quisieras acompañar a mi casa?

-Por mi no hay ningún problema

-Creeo que ya estoy estorbando aquí así que me voy- le daba una palmada en la espalda a Carlo mientras se alejaba del grupito- hasta mañana, si es que hay un mañana

-Entonces...¿Nos vamos?

-Zhi- Juliana asintió con la cabeza mientras lo tomaba del brazo

Ella era la que tenía control del camino mientras que Carlo solamente quería alejarse un poco del mundo, y no había otra mejor manera que acompañar a la indefensa Juliana hasta su hogar, su amor platónico se le había acercado llorando para buscar protección y bueno, ¿Quién es el para decirle que no?. Así que salen del colegio cogiendo rumbo para su hogar

En el transcurso del camino no hablaban casi, se miraban un par de veces para sonreír ligeramente, Carlo decía algún qué otro chiste para romper el hielo -cosa que no funcionaba del todo bien- y nada más, eso hasta llegar a la puerta de su casa.

-Hasta aquí mi protección mi estimada Juli- hablaba con voz de mayordomo Carlo duty

- ¿Eso significa qué ya no me protegerás?- se acercaba un poco mas a Carlo

-Solamente por hoy- decía acercándose un poco más a ella

-Claro, eso es tienes otra amiga -le pegaba en pecho haciendo berrinche

Carlo estaba un poco confundido ante la situación, su mente le decía que se fuera porque ir de noche era algo peligroso mientras que su corazón decía que la besara de una vez por todas.

- Tu sabes perfectamente que no te dejaría por nada- le tomaba la mano a Juliana

- ¿En serio?- Se acercaba un poco más a él

Amanecer: El asesino del puzzleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora