You got me... I got you ||Yeonbin||

Plans

—¡No! ¡No, Yeonjun! ¡No! — gritó Taehyun.

—Pero-

—No —dijo bajando la voz

—Pero-

—¡No! Yeonjun, no vas a usar mi casa para dar una súper fiesta por el inicio del curso —con aquella frase y un bufido Taehyun se dejó caer sobre el sofá de la cafetería.

Algunos de los clientes del lugar habían volteado a ver con el primer grito de Taehyun. Aunque perdieron el interés cuando la otra persona no contestó de la misma manera. Yeonjun realmente no entendía porque su mejor amigo se encontraba tan enojado. Aquella no era una petición que no hubiese dicho antes, así que, en realidad no había ninguna razón para que gritara de aquella manera.

Así que Yeonjun decidió que, como el mayor de los dos tenía que comportarse de forma madura.

—Tae, escucha, esto es muy importante-

—No, no lo es —interrumpió Taehyun.

Fuck it.

Yeonjun no tenía tiempo para ser maduro.

—Por favor —suplicó intentando poner la mirada más tierna que tenía.

—Esa mirada podrá funcionar con Hueningkai o con Soobin, pero no conmigo —advirtió su mejor amigo.

—Por favor —siguió.

—No

—Por favor —volvió a insistir.

—La última vez casi llega la policía — Taehyun recordaba el suceso vívidamente. Sus padres eran estrictos en ese sentido, y si por culpa de su mejor amigo ellos acababan pagando alguna multa las consecuencias podían llegar a ser letales.

—Por favor

—Y la casa siempre queda sucia —ese también era otro punto, Taehyun ya estaba cansado de tener que limpiar todo él al día siguiente, o que la señora de la limpieza le cobrará un día extra por ayudarle a dejar todo mejor. Con tal de que sus padres no se enterarán de los desastres de la fiesta. Así se había librado en más de una ocasión de un castigo.

—Limpiaré, lo prometo

—¡No!

—¡Por favor! ¡Por favor! ¡Por favor! No te pediré nada más en un tiempo

—No

—¡Por favor!

—Esto se está volviendo cansado hyung —comentó Taehyun con frustración.

Yeonjun no podía estar más de acuerdo con ello. Pero no estaba acostumbrado a abandonar una misión solo porque le parecía difícil. Conseguiría que Taehyun le permitiera usar la mansión de su familia para la primera fiesta de la universidad. Sin importar lo que tuviera que hacer.

—Terminaríamos más rápido si aceptaras mi petición—explicó Yeonjun sin dejar su fachada de niño bueno, era infantil pero siempre efectivo—aunque quizá debería llamar a Beomgyu para que te convenza.

—No metas a Beom en esto—advirtió.

—Pero Beom estaría de acuerdo con que hiciéramos la fiesta en tu casa—se defendió Yeon.

—Beom estaría de acuerdo con cualquier cosa que incluya bailar —dijo Taehyun.

—Mejor razón para hacer la fiesta en tu casa—replicó Yeonjun—. Tómalo como una oportunidad de hacer feliz a tu novio. Beomgyu lo pasará bien en la fiesta. ¡Por favor! ¡Por favor! ¡Por favor!

Taehyun suspiro. Incluso si no hubiese sacado a Beomgyu en la conversación, seguramente habría acabado por decir que sí. Se sentía sumamente cansado con la semana que estaba teniendo. Solo cuatro días de clases y sentía que los profesores estaban en su contra. En momentos como ese realmente pensaba en abandonar la carrera de medicina. Pero no lo haría. Aun con su vida social a punto de morir.