Ayudando al Dame

¿Estas listo?

Squalo suspiraba un poco cansado...apenas tenía un mes...pero lo sentía como una eternidad, no podía esperar a tener a su pequeño o pequeña a su lado.
Había sido concebido por amor...y un poco...solo un poco de alcohol y una que otra inocente amenaza por parte de cierto castañito que ahora mismo debía seguir atado en la recamara.
Vaya...realmente nunca esperó nada de eso en su vida, su identidad como doncel había pasado por desapercibida por años...e incluso si sentía algo por su jefe imbécil lo había ocultado bien pero...justo él gran loco de varias, llamado Lussuria lo descubrió e incluso consiguió aliados...
Pero no se quejaba...no mucho...tal vez prácticamente nada, pero no podía decirlo en voz alta.

De lo contrario, jamás de la iba a acabar.

Recordó con cariño, que en si rostro tomo presencia como una disimulada risita, y su mano acaricio su vientre.

-Al menos si él plan de ese bastardo fastidioso...tal vez dentro de poco tengas un amigo con quien jugar...mi...pequeño-.

Cuando llego a la puerta después de su pequeño recorrido, pudo ver a un silencioso doncel.

-Oí...-

Le llamo con él tono mas bajo en su voz, tampoco quería infartar al castaño...quien aunque nervioso le sonrió con alegría.

-Hola , Squalo ¿Todo esta bien?-

Pregunto con amabilidad, algo típico en un cielo con su pureza.
El chico estaba atado y secuestrado y seguía preocupandose por su familia.
De verdad que él cielo de Vongola era un caso especial, definitivamente ese niño merecía la absoluta felicidad.
Hablaron un momento, algo curioso es que él doncel menor hablaba con soltura y parecía indiferente por él momento de estar atado...bueno al menos ya sabia que tal vez no se quejaría tanto cuando llegara algún momento con su pareja y este quiera atarlo...bueno tal vez no, eso era algo más propio de Xanxus.

-Tsunayoshi...-

Al fin hablo él guardián de la lluvia varia, él ambiente entre ellos era ameno y agradable, él decimo cielo estaba bastante cómodo.

-¿Que pasa Squalo?-

-¿Que elegiste?¿Vas a seguirle él juego a ese raro de Lussuria?-.

-Yo...si...creo que si...-

-Oí bastardo...decide...-.

Squalo en arco una ceja, esperaba la respuesta de él doncelito castaño, dependiendo de lo que contestara sería a donde se inclinaría sus acciones.

-Yo...si, lo intentaré... buscaré conquistar a Hibari-

Squalo sonrió , al ver él brillo emocionado e ilusionado en ese par de orbes chocolate, tan decidido, era de conocimiento casi general dentro de Vongola de los sentimientos de ambos...del Décimo capo y su guardián de la nube...incluso Lussuria tenía ya un plan trazado para emparejarlos, por medios normales, por medio de celos...y otro un poco mas extremo.

-Voiii Tsunayoshi...¿Estas listo?-

-¿He?-

El castaño ladeó su cabeza confundido, Squalo quiso golpearlo por ser demasiado adorable...pero se contuvo.

-¿Estas listo para conquistar?-

-Oh...s..si-

-¡Escoria dilo con fuerza!-

-¡E...Estoy Listo!-

Ambos donceles se vieron con una sonrisa decidida.

Todo estaría bien, Squalo lo apoyaría a su manera...y para Tsunayoshi esto era una oportunidad única en él mundo.

Y no la iba a desperdiciar...se iba a esforzar.