Ayudando al Dame

Cosas De donceles.

Squalo se había aburrido un poco de ver a Tsunayoshi ser torturado por su compañero Lussuria, él y su pequeño tenían hambre...y comida iban a obtener.
Así que dejando aquel lugar donde correría sangre, mejor se fue a la cocina.

Xanxus observo a su pareja retirarse, no le siguió, debía vigilar que su emocionado guardián del sol no perturbara demasiado al décimo cielo Vongola.

-Neh~ Jefe...deberías ir con Squalo, yo me encargare bien de Tsu...-

El colorido guardián sonreía alegre mientras abrazaba a un pequeño castaño que en su inocente mirada rogaba a Xanxus no lo dejara solo con Lussuria, estaba dispuesto hasta hacer su papeleo si tan solo era librado de las garras del varia.

Mientras él azabache parecía recurrir a su humanidad y ayudar al castaño, la mirada de loco de Lussuria era sin duda aterradora, pero por su orgullo no lo diría ni demostraría.

-Jefee, ande vaya con su tiburón ..procure que no mate a nadie, la ultima sirvienta en la cocina a quedado traumatizada...moh~ ese doncel debería bajarle a su carácter.-

Dramático como siempre él varón extravagante simuló llorar con un imaginario pañuelo. Ambos jefes se miraron pero él castaño aun imploraba silenciososamente por su libertad.

-Voy a la cocina, basura...-

Gruño mientras se retiraba de la habitación y él mundo de Tsunayoshi caía en escalas grises y lloraba en su interior, ya se vengaría.

-¡Xanxuus!-

El grito de él pobre castaño fue sonoro tanto que se escucho por toda la mansión varia después de todo el décimo Vongola tenía unos muy fuertes pulmones.

El azabache de ojos rojos salió de la recamara dejando solo al lunático de Luss con Tsuna...

-Ahora Tsu mamma Luss hara su magia...-

El aura del guardián del sol se volvió pesada y misteriosa, él castaño trago grueso, era si fin...y jamás le diría a su amado...que le amaba...

Cambiando de plano Squalo tenía a punta de espada al cocinero quien se atrevió a negarle él filete que cocinaban especialmente para él jefe de la mansion,osea su esposo Xanxus.
Solo pocos sabían de su embarazo...refierase al metiche de Lussuria, a la piña coqueta flamante amante de un malvavisco, él décimo Vongola, su propia pareja, Reborn y tres de sus amantes, oh y él galeno.

Pero ahora estaba a punto de destripar a ese intento de cocinero imbécil

¡EL Y SUS HIJOS QUERIAN ESE PEDAZO DE BISTECK!

No era cosa totalmente suya pero los cambios de su cuerpo lo agotaban a veces, según Tsuna incluso ahora era diferente...y bueno él seguía siendo él.

-¡¡¡VOOOOOOOOOOOI!!!-

El grito de él albino asusto a todo él personal de la cocina, y mientras Estaba a punto de hacer blandir su espada y conseguir su antojo, llego su esposo, pareja y jefe.

-Tsk , basura...¿Que quieres?-

El cielo de Varia miraba a todos con él ceño fruncido, y desenfundaba sus armas para amenazar mas con su presencia.

-Nada que te importe idiota...-

Gruño Squalo mientras miraba de reojo al cocinero a quien tenia con su espada apuntando a la garganta listo para de un movimiento arrebatarle la vida.

-Basura...-

-S...señor-

El azabache le dirigió la palabra al tembloroso hombre y con su miedo expresado en cada parte de su ser contesto temeroso de su destino.

-E...él señor Squalo, desea comer...la carne que es para...para...usted en la cena de hoy ...-

-Dasela-

-¿Señor...?-

-Dasela,  denle todo a la basura gritona, todo lo que pida.-

-Hum- Squalo sonrío suavemente ,satisfecho aunque ya no le apetecía esa carne sino algo mas ligero, tal vez sushi. Obligaría a Yamamoto Takeshi. Pero eso sería mas tarde.

Tal vez podría acostumbrarse un poco...las cosas de donceles eran Complicadas pero al menos era feliz con ciertos detalles, como su bebé.

-¡¡¡SALVEEENMEEEEEE!!!-

Un grito agudo resonó en sus oídos, sin duda ver como él décimo Vongola era unido perfectamente con. Lussuria ,aunque seguramente cierto arcobaleno ya debería estar a punta de arma de ir por su dame alumno.

Si cosas muy divertidas se avecinaban...pronto muy pronto.