Ayudando al Dame

Tu dulce mirada

Habían pasado un par de horas, Tsunayoshi estaba ahora encerrado en un cuarto con Lussuria,mammon, Fran y Squalo.

Xanxus se había quedado solamente con los tres guardianes de él doncel castaño.

Y Reborn, después de haber sido liberado había sido atacado por un dardo cortesía de Verde y amordazado por un rubio con cara de pocos amigos fue arrastrado dentro de la mansión donde su para nada raro guardián del sol los condujo a una habitación insonora.

Fon ya casi llegaba junto a Kyoya a la mansión.
Después de inventarse un par de excusas para evitar ser mordido hasta la muerte y confirmarle al azabache que Tsunayoshi estaba bien y que había aparecido hacia un rato y por casi por un segundo, por una mínima fracción de segundo pudo ver una seña de relajación por parte del azabache de ojos grises... Casi pudo verlo sonreír. Eso sumaba mucho más en su puntaje como pareja ideal para él pequeño castaño protegido de Lussuria,Varia y Vongola.

Costo mucho evitar que mordiera hasta la muerte a cualquier Herviboro que se le quedara mirando.

Y es que él demonio de namimori era toda una belleza exótica del lugar del sol naciente, aparte de que atraían mucho las miradas.

Al fin habían llegado, se sentía tan aliviado...y tan...oh.

Tan solo de observar por fuera del portón de la mansión Varia sabia que una pequeña gran catástrofe había pasado ahí.

Se notaban signos de batalla pero nada fuera de lo normal.

Adentro de la mansión en una recámara cerrada Lussuria había obligado a Tsuna a irse a bañar.

-Tsu...mi bello Tsu, mamma casi muere, mi cutis se llenara de arrugas por tu culpa niño travieso...anda date un baño, que una Alondra viene pronto a visitar él nido.-.

Tan animado como siempre él colorido guardián empujaba al castaño a dentro del baño, él loco de Luss había preparado una tina caliente aromatizada de esencia de rosas y lo había logrado, había metido al doncel dentro.

Encima de la cama Fran contaba él dinero con Mammon y Squalo estaba sentado revisando la ropa que se iba a poner Tsunayoshi, riéndose dentro de si al notar cierta prenda interior....Lussuria era un maniático con problemas de cupido sin duda alguna, a su lado algunas chocoavellanas que él castaño le habia comprado para pasar él rato.

Un mensaje llego al móvil del guardián de la niebla varia.

En la pantalla se leía :
"Fon(〃＾▽＾〃)o"

Fran sin dudar tomo él teléfono de la niebla, haciéndole ciertas burlas con respecto a él nombre de su pareja.
El texto decia:
"Fon(〃＾▽＾〃)o

Ya estamos aquí, vamos a pasar".

-Oe, Luss....-
Un peliverde con rostro neutro le hablo a Lussuria que esperaba a Tsunayoshi a la puerta.

-Mamma Luss, querido Fran, mamma luss-.

Fran solo se le quedo mirando un momento, dio un pequeño respiro y volvió a hablar.

-Luss...-

Por un momento pudo ver a Lussuria ser rodeado por un aura negra y poderosa que daba miedo pero no iba a darse para tras.

Por que si le decía mamma probablemente apenas cumpliera los 15 y sabiendo de su condición como doncel intentaria emparejarlo...

-El amado chino de este avaro dice que ya llego y trae un ave exótica de lejanas tierras consigo.-

Tal vez era un comentario burlón pero con la voz de Fran no se sabia del todo.

Y todo lo que paso después fue una enorme luz proveniente del guardián del sol de varia.

En él recinto principal de la mansión en un incómodo silencio llegó Fon con  Kyoya.

El panorama definitivamente era raro...o extraño.
Xanxus, Gokudera,Yamamoto y Ryohei estaban a las bases de la escalera recibiendo a los recién llegados.

Para ese momento Tsunayoshi apareció junto al pequeño séquito de Lussuria.

Vistiendo un traje negro algo justo, pero viéndose adorable y tentador a la vista.

Los demás donceles parecían un grupito típico lanzando a la presa al cazador.

-Hibari , disculpa las molestias al hacerte venir desde japón...por etto...-

¿Donde estaba Reborn para darle un golpe y hacerlo reaccionar?.

-¿Estas bien Herviboro?-.
Tsuna, le sonrio con ternura.
Ambas miradas se cruzaron, se sonrieron se juntaron en un solo instante.

Tan tiernos.

Ellos en su mundo y Lussuria sacando fotografías como si su vida dependiera de ello.

Ya sabría como hacerlos pareja.