capítulo final

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Caminé hasta donde estaba mi padre y le di la mano. Él me miró con una sonrisa tan transparente,  que al mirarle pude observar que estaba muy orgulloso de mí.

Caminamos juntos hasta donde estaba Jared para dar un gran paso;  de novios,  a marido y mujer.

Si empiezo a contar mi boda con detalles, podría pasar un año y no la termino de contar, pero al final Jared y yo por fin estamos juntos.

Subimos al avión para irnos a Berlín y allí tener una luna de miel bastante tranquila.

Al llegar al hotel después de un largo viaje, un botones nos llevó las maletas hasta nuestra habitaciôn. Le seguimos para no perdernos, hasta que llegamos a la misma.

Parecía bastante acogedora, con unas vistas impresionantes y una gran chimenea para dar calor.

Jared se tumbó en la cama mientras yo me metí en el cuarto de baño para ducharme.

En la ducha se piensan muchas cosas, pero pensé en el tiempo; en lo que había pasado a lo largo de mi vida hasta ahora, en cómo pasé de una niña que jugaba al baloncesto con su hermano a una chica que se acaba de casar con el hombre de su vida. No me arrepiento, la verdad;  más bien han pasado bastantes cosas y me cuesta mucho creer que el tiempo pasa tan rápido.

El agua pasó de fría a muy caliente en un momento.

-Joder, ¿qué mierda le pasa al agua?  ¡Esto quema! -Grité.

-Sí que estás caliente. -Pude escuchar la voz de Jared en tono burlón.

-No, idiota, cierra el grifo que me estás quemando.

Jared se rió y salió del baño cerrando la puerta suavemente.

Salí del baño con una toalla alrededor del cuerpo y busqué en el armario mi maleta para buscar la ropa.

Jared me agarró por la cintura y me susurró al oído un "te amo". Acto seguido me tumbó en la cama y puso sus manos a ambos lados de mi cara. Me besó lentamente y se quitó la camiseta...
                        Siete años después

-Papi, mami, ¿podemos ir al parque?

Los dos sonreímos:

-Claro que sí, hijo.

Los efectos del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora