Aprender

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(Ruben)

Me duele la cabeza...no sé cómo es que pude soñar con tantas tonterías, debo tener una mente muy perturbada para terminar viendo hasta un dragón. Mejor me voy a levantar porque se me hace tarde para ir a la casa de mis abuelos.

-Al fin despiertas-¿Qué?¿No era un sueño?. De verdad ese hombre con kimono está aquí y...

-No te me acerques- Estoy aterrado. No sé como terminé aquí, pero con tan solo ver su cara pienso en ese dragón gigante. Debe ser mentira que él sea esa cosa-Me vas a comer, estoy seguro-

-Tranquilo, no como humanos- No sé si creer en sus palabras, ni una pizca de confianza tiene. A parte de que es un demonio-Vamos, no me mires así. Solo estoy tratando de hablar contigo sin que nadie nos interrumpa-

-No te creo... tus ojos dicen otra cosa. Por favor déjame ir, yo solo viene a lugar a revisar unas cosas donde mis abuelos-Ya no puedo aguantar más. Espero que al verme llorar tenga compasión y me deje en paz.

-Eres igual a ellas... debí hacer el trato con otra familia-Dijo suspirando-Pero por ley eres mío. Y no te dejaré escapar con vida de aquí
si tenías pensado-

-¡Vez...me vas a matar de todas formas!-Le grité tratando de escabullirme lentamente sin que se diera cuenta. Pero no resultó y al segundo después me tenía acorralado en una de las esquinas de esa pequeña caseta.

-Mira...te dije que no era de los que no comía humanos. Pero un Dios tiene su límite y tu ya estás bastante cerca de acabar con el- ¿Un Dios?, sigo pensando que es un demonio. Los dioses no hacen este tipo de cosas.

-Entonces...¿Por qué no actúas como uno?, ante mis ojos eres un demonio cualquiera- Él bajó sus brazos pensando en las palabras que le dije. Pensé que al hacer eso me dejaría irme al fin, pero rápidamente volvió a acorralarme haciendo que me asustara mucho.

-¿Sabes cómo actúa un Dios?-¿Y esa pregunta a qué viene?

-¿P-por qué lo preguntas?-

-Responde, no te mataré si me dices como actúan-¿Qué hago...?, esto puede ser mi salvación.

-C-claro que sé... estudié un poco sobre los dioses mitológicos y...y aprendí sobre cómo debería actuar un Dios ante los suyos- Tengo que inventar algo rápido, no quiero estar más aquí en este pequeño lugar que huele a humedad. Terminaré muriendo por culpa de eso en vez de ser asesinado.

-Entonces dime, ¿Qué hay que hacer?- Su actitud cambio completamente a una alegre. Hasta me regaló una pequeña sonrisa. Es demasiado raro...

-Bueno no sé...¿Has tenido contacto con humanos últimamente?-

-Si te refieres a eso...solo con un antepasado tuyo. Pero no por mucho tiempo, así que creo que no- Oh vaya que mal.

-Entonces, ¿Qué te parece bajar al pueblo conmigo para que conozcas a las personas?-

-¿Bajar?¿A mezclarme con ellos?- Él negó de inmediato alegando de que no era bueno mezclarse con ellos.

-Eso es lo primero que no debes hacer. Un Dios debe tener empatía con el pueblo y al obtenerlo. Las ofrendas lloverán-

-Entonces así era...el tiempo que llevo aquí han venido a dejarme cosas, pero no les doy nada a cambio. Solo lo hice una vez y creo que fue un error- Un error para él y mala suerte para mí...no hay mucha diferencia que digamos.

-Lo vez, por eso no tienes la idea de cómo es un verdadero Dios. Seguramente pasas encerrado aquí por mucho tiempo- Él asintió mirando hacia afuera.

-¿Dices que si bajo más seguido al pueblo, voy a empezar a ser un Dios de verdad?-

-No digo que no lo seas. Solo tendrás más empatía con los humanos y seguramente hará que cambies tu actitud un poco-

-Esta bien...bajemos ahora-

-¿Ahora?- Asintió tomándome de la cintura-Por favor ten más cuidado conmigo. No quiero desmayarme-

-Entonces cierra los ojos- Dijo para luego saltar a toda prisa destruyendo su templo a su paso-No te preocupes, se arregla solo-

-Está bien...-

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Toy die

Ofrenda (Rubegetta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora