STAY WITH ME

CAPÍTULO 11

C.H vs C.H

María del Pilar

Aquí estaba, junto a Camila alistándonos para ir a la casa de ese idiota.

Susana al escuchar que si iríamos salió muy feliz y nos dijo que en una hora saldríamos.

¿Qué si le pregunté si estaba bien ir?
Por supuesto que le pregunté y ella asintió fingiendo una sonrisa, se lo nerviosa que esta ya que siempre que lo estaba inconscientemente mordía su labio y jugaba con los dedos.

- Cami apúrate - digo sentada en la cama esperando a que ella salga del baño - ya terminé de alistar tu ropa - digo viéndola salir del baño con una bata puesta - Hey necesito que cambies la cara, si vas a ir no demuestres que te afecta. Quiero que te vea divina con el conjunto que te prepare, pero si no sonríes no servirá de nada.

En este pequeño tiempo que llevamos de amigas, me he llegado a encariñar bastante de ella, se lo linda y sincera que es, muy diferente a todas las chicas que he llegado a tener como "amigas".
Es la primera que no se preocupa en sí tienes un apellido prestigioso o si puedes recibir algo a cambio de su "amistad". La quiero demasiado y verla de esa forma me dolía, nadie, ni una mujer merece estar mal por un imbecil.

- Mapi gracias. Realmente me siento estúpida- dice abrazándome con una sonrisa triste.

Mientras ella se estuvo cambiando, yo me adentre en el armario y trate de escoger algún conjunto que me fuera bien. Decido ponerme un polo de tirantes rojo y unos jeans de mezclilla, el clima era cálido a pesar de ser d3 noche, así que debía aprovecharlo.

- Vámonos que Susana nos debe estar esperando - digo cuando la veo vestida por completo.
La falda de tela blanca le va muy bien, al igual el top negro y me alegro de haberle escogido bien. Su cuerpo curvilíneo hace que las prendas le den perfectamente. Su cabello castaño lacio cae por su espalda hasta su cintura y el maquillaje que lleva la hace lucir a un más preciosa de lo que es.

- Me gusta cómo me veo - dice mientras le coloco un collar a juego.

- No eres la única que piensa eso - digo tomando los bolsos de ambas y luego le tomo de la mano - Ya nos tardamos media hora más de lo que dijo Susana, vamos.

Bajamos y nos encontramos a Susana que ya esta lista. Por supuesto Lucía muy elegante y esque a pesar de no llevar vestidos de fiesta siempre lleva aires de altitud - Nos vamos chicas.

Cami asintió y aparte de presionarme fuertemente la mano, se mordía el labio, tanto que ya estaba rojísimo.

Ruego porque esto salga bien.

Camille.

Susana toca el timbre de la casa de Fabiola e inmediatamente abre una señora de servicio, la saludamos y pasamos encontrándonos con Fabiola.

Se acerca y nos saluda a cada una sonrisa. Observó la casa y aunque ya estuve aquí me sigue sorprendiendo lo bonita y grande que es la estancia de los Herault.

Poco después aparece un hombre alto. Su porte impresiona y llama la atención de todas nosotras, reconozco ese rostro de inmediato y se que ya lo he visto en revistas, pero no es lo único que se me viene a la mente, aquellos ojos azules zafiro ya los había visto antes. Varias facciones en él también los tenía Caleb y después de todo es su hijo.

A su lado se encuentra una chica rubia, de rostro bonito. Una sonrisa se le forma en el rostro al vernos a todos. La chica es alta y delgada y aunque no tiene mucho parecido a Caleb o su padre se que es su hermana. Keyla la chica que hasta el momento no he podido conocer.

- Cariño - dice Fabiola percatándose de su esposo. El hombre la toma de la cintura y se acerca a nosotros.

- Hola Susana ¿Cómo has estado? ¿Cómo esta Richard? - habla con el tono un tono de voz demandante.