vainilla. 𝐎𝟏

🌼 O7 🌼

-Hyung no me cansaré de agradecerle que me salvara -dijo el omega menor hacía jung quien asintió.

-Si ese tonto te llama dímelo, hoy sabía que era su celo.

Jeon agachó su cabeza como un cachorro apenado, tenía un leve sonrojo en sus mejillas, después sintió unas caricias en su cabellera haciendo que poco a poco levantara su rostro, admirando la dulce sonrisa de Namjoon.

-Ggukie no queremos que te pase algo, tienes que cuidarte, aunque sé que eres muy fuerte no debes confiarte.

El omega abrazo al más alto quien sonreía dulce y seguía dándole mimos su cabello, mientras que el alfa miraba como ambos interactuaban, además de la sencillez y humilidad de su jazmín.

Se detuvieron en una calle que el moreno indicó, fue hasta ambos amigos tomando sus manos, Jeongguk no contuvo un chillido mientras que hoseok le sonrió dulce.

-Gracias por tenerme en su hogar, y sobretodo salvarme, te debo la vida Hoseok hyung -Jung iba a contestar cuando sintió unos labios en su pómulo, dejándolo sin aliento.

El omega menor sonrió al ver aquella tierna escena, estaba seguro que Namjoon era el omega más tierno que había conocido, y sabía que el lobo de Hoseok estaba más que encantado por ese chico jazmín, pero lo que más lo volvía feliz, era que el moreno amará ese olor a vainilla que su mejor amigo detestaba.

Después de aquel beso, hizo una pequeña reverencia ante un sonrojado Hoseok quien sólo lo miraba, el contacto fue tan irreal que aún necesitaba pensar que acabo de pasar. Namjoon se despidió de Jeongguk para después irse hacía su casa, el omega se encargó de ver que entrara porque Jung seguía en su mundo.

Kim cerró la puerta detrás suyo, sonriendo y llevando sus manos a sus pómulos también rojos, su lobo sólo daba vuelta bastante feliz, quería gritar lo mucho que le gustaba Hoseok, aquel bonito alfa con olor dulce, su corazón latía con rápidez. Su mundo cobró color en una simple noche.

Jeongguk agitó su mano frente del mayor quien seguía en trance, parpadeo varias veces hasta mirar la calle y sin su omega con olor a jazmín frente suyo, sólo el pequeño Jeon quien lo miraba feliz, tenía tiempo que veía a su querido hyung así.

Regresaron a su casa, Jeongguk pasó a su trabajo, jung tenía un examen mañana así que tendría que estudiar, llegó a casa, el jazmín estaba en el aire, Hoseok aspiró este, tal vez Namjoon se había ido, pero se había encargado de dejar una parte de él, su lobo aulló feliz. Se dirigió a su escritorio, apagó las notificaciones del móvil para estudiar, aunque, con ese olor en su hogar era algo complicado.

Después de unos minutos cerró sus libros, frotó su cien levemente, miró la hora, jeongguk ya debió haber vuelto, salió de su recámara encontrándose con el menor comiendo comida instantánea, ramen junto a su leche de plátano, al mirar a su hyung lo invitó a sentarse.

-Creo que soy un omega poco ejemplarn-murmura el menor mientras daba un sorbo a su bebida.

-¿Por qué, por no saber cocinar?

El menor asintió mientras hacía un leve puchero, cada día veía tutoriales para poder cocinar algo que no fuese calentar agua, pero una de esas ocasiones termino por casi generar un incendio en el que Hoseok de desmayó de sólo ver el humo.

Al recordar aquella ocasión no pudo evitar reír, Jeongguk aún tenía ese puchero en sus labios mirando con el ceño levemente fruncido a su mayor.

-Eres un omega único que ve siempre por los demás, que sale a las calles en las noches sin importarle el riesgo, así que, no debes sentirte mal -le sonrió comprensible, jeon sintió sus ojos picar.

-Ah, hyung me hará llorar.

Hoseok soltó una risa, terminó de comer dejando el envase vacío sobre la mesa, abrazo al menor por los hombros mientras le daba palabras de aliento. Después de cenar, Jung ordenó la mesa, lavó los cubiertos dejándolos secar, después fue nuevamente a su pequeño espacio estudiando unos minutos más antes de irse a su rodada nocturna.

El castaño apareció listo para poder irse, Jung se levantó para irse, salieron del departamento para poder ir a su territorio, al llegar ya varios estaban ahí, al ver llegar a líder hicieron una pequeña reverencia en señal de saludo, Hoseok sólo sintió.

Entre estos, el castañito visualizó a Jimin quien reía con la omega, trato de esconderse, pero fue tarde pues el mayor ya lo había visto, pero decidió acercarse en otro momento, pues ahora Hoseok estaba cerca de él.

Después de hacer los grupos, salieron a cuidar, jung fue a la misma calle noche atrás, aunque su encuentro no era algo lindo, sabía que podía volver a ver a otro omega ser abusado, sólo tenía precaución.

Sook al notarlo pensativo se acercó a él para poder saber que tenía, por lo general era más despierto y estaba al tanto de sus acciones.

-Y, ¿qué paso con el omega del otra vez? -caminaba a su lado mientras que miraba como la expresión del menor cambió.

-Nada, él sólo volvió a casa y hasta ahí.

-Chico vainilla hueles a él, algo más paso, el día que te llamó Jimin por lo de tu madre.

El alfa sonrió, después de todo era malo mintiendo cuando alguien estaba en su cabeza.