UNA CHICA ENAMORADA [~Terminada~]

30: Diferentes pensamientos...

- ¿P....por qué haces eso?- en realidad no quiero llorar aquí, pero ¿todo fue un engaño desde el principio?..realidad soy una estúpida. 

- porque me divierte hacerlo, porque no me importan tus sufrimientos y porque quiero.

- ¡Me tocaste! MALDITO PERVERTIDO.

- ¿Y qué?

- NO TE ACERQUES.

- ¿Te das cuenta Alan? - se acercó a mí  moví mi cuerpo, pero casi no podía moverme. Agarro mi barbilla y me besó. - pequeña tú infierno comienza. - una lágrima se escapó, no pude controlarla.- no llores pequeña, aquí llegó tu novio para secarte esas lágrimas, sabes que nunca me ha gustado que llores.- Dice de una manera maliciosa y con una sonrisa en su rostro.

Él me besó nuevamente y lo que más me duele es que él me hablaba tan bien... Él era muy atento conmigo, pensé que en realidad estaba enamorado de mí, pero todo era una falsa y yo que pensaba en casarme con él, tener dos hijos, un perro y una gran casa... pero no siempre tenemos lo que queremos y la vida puede dar muchas vueltas como me duele saber qué otra vez tuve mala suerte en el amor. Es increíbles.

- Pequeña desde ahora seré yo que me encargaré de tí. Es mi deber como novio...- se ríe y sale de la habitación.

*** ha pasado una semana.

Tengo tanta hambre y no me han dado nada. Para ir al baño Daniel me acompaña, me mira mientras me ducho... Esto es vergonzoso. Para darme algo de agua tiene  que tocarme parte del cuerpo. Estoy enamorada de él, pero esto es el colmo... Él me agarra los senos. Y no de una manera suave. Mis pechos están rojos y dolorosos.

***Lorena 

Es increíble ¿Cómo ellos pueden hacer esto? Sí me niego a comer Nayelis paga las consecuencias y el estúpido de Daniel siempre quiere ponerle sus sucias manos... Es repugnante y todo es culpa mia. Ya entiendo porque me caía tan bien... ¡Es mi hermano!

El estúpido Daniel tiene siempre una navaja. Que le hace liberos cortes a mi hermana, haciendo que brote sangre. Tengo que obedecer. Aunque no me gusta ya que parezco una niña mimada. Pero lo odio ya que una persona muy importante para mí sufre y yo estoy como una reina. No es justo. 

Me separaron de ellos, la habitación es muy amplia así que me encadenó el pies derecho en la cama. Así según él, su niña no le pasará nada.

No me puedo acercar a ellos así que no quiero dormir en la cama. Me siento lo más lejos que puedo de ella.

- Lorena, acuéstate en la cama.

- ¡Claro que no Nayelis! Mira como estás. Y todo es culpa mía.

- Es tarde... Y sabes que si no te encuentran acostada en la cama Nayelis pagará las consecuencias.

- esto no es justo. -me quejo.

- lo se. Estoy es jugar con los sentimientos, de las personas. Esto no lo hace una persona que sienta remordimiento... No te preocupes por mi. Y duerme.

Siempre haciéndote la fuerte... ¿Eh hermana? Se que estás mal porque aún estás enamorada de Daniel. Y todo esto te afecta, pero no tienes que fingir conmigo. Se que sufres. Y me odio por eso. No se cómo pedirte disculpas.

- Está bien iré a la cama. - creo que es muy tarde de la hora de la noche. Ya que hay reflejos de la luz de la luna.

Nayelis se durmió, se que está cansada.