Hemos visto a los santos dorados de muchas formas y colores, pero se han preguntado cómo sería un universo omegaverse de este grupo de caballeros. Claro que lo hemos hecho, por eso en universo distinto al ya conocido por todos nosotros, existía un universo en donde el omegaverse era posible, dentro del santuario existía una gran variedad de segundos géneros.
El primero de todos Mu de Aries, era un alfa emparejado con otro alfa, Shaka de Virgo, el segundo género en ambos nunca fue un problema, su amor fue más fuerte que cualquier raza o género. Una situación muy similar era la que vivían Campus de Acuario y Milo de Escorpio, dos alfas que se amaban, comenzaron siendo mejores amigos y el tiempo juntos fue lo que los unió y el mismo tiempo es el que los mantendría juntos.
Había otros que fueron ejemplo para muchos, su amor trascendió las barreras del tiempo y el espacio, ese par eran Dohko de libra y Shion de patriarca. Una relación que empezó con dos desconocidos y termino convirtiéndose en una relación que trascendió todas y cada una de las barreras del tiempo. Dohko un alfa que en medio de la guerra encontró a su omega destinado.
Dohko y Shion no eran la única pareja destinada entre sus filas, la pareja más hermosa y duradera de todas eran la que conformaban Aphrodite de Piscis y Death Mask de cancer, un omega sueco que encontró el amor en alfa italiano, ambos se amaban tanto que desde niños se dieron cuenta de que el otro sería su más grande amor, por siempre y para siempre. Cabe mencionar que fueron los primeros en tener vínculo, una marca y en tener un nudo, por desgracia en más de una ocasión ambos perdieron a más de un cachorro por las circunstancias de la guerra, los conflictos habían dejado muy maltratado al útero de muchos omegas, uno de ellos era Aphrodite, sin embargo a pesar de todo, ellos lo iban a seguir intentando, seguirían teniendo el deseo de ser padres y lo intentarían hasta el final de sus días.
Los cuatro últimos gran alfas del santuario, Aldebaran de Tauro, Aioria de Leo, dos alfas muy distintos que curiosamente ambos amaban su vida, el caballero de Tauro encontró a su destinada en las calles de Rodorio una hermosa chef dueña de un restaurante, Aldebaran era el único de los caballeros dorados que había logrado concebir y el no fue el único feliz, todo el santuario amaba a los tres pequeños hijos del caballero dorado de Tauro del siglo XX.
Luego teníamos a Aioria de Leo que se enamoró de Marín una omega, que había renunciado a su segundo género, haciéndose pasar una beta, el amor que en ellos dos nació, llegó primero en forma de administración para después convertirse en un amor que se sentía como si dos almas gemelas se encontrarán después de muchos años separados, el amor entre ellos dos era tan fuerte que nadie se atrevía a cuestionarlo. Ni siquiera Shaina de Ofiuco que era una alfa enamorada de Marín pudo separar el amor que Aioria y Marín habían formado y construido, juntos.
El otro par de alfas, era un amor tremendamente prohibido, Saga y Kanon de Géminis, dos hermanos alfas que a pesar de que los unía un vínculo sanguíneo, eso no les impidió amar al otro, podríamos decir que todo nació del fuerte vínculo entre ellos, su amor nació de la relación existente entre ambos, que al cabo de un tiempo se hizo cada vez más fuerte, más unida y más prohibida, aún así lo que importaba era el amor y el deseo tan grande que tenían por su otra mitad.
Dentro del santuario teníamos a dos omegas en el templo de Aries, a Mu y Kiki de Aries, dos hermosos omegas que estaban siendo cuidados por Shaka de Virgo un fuerte y poderoso Beta, que amaba con locura a esos dos omegas.
Y por último pero no por ello menos importante en el santuario del siglos XX teníamos una pareja de betas, Aioros y Shura eran dos betas, que se amaban demasiado, un amor inocente que con el tiempo fue convirtiéndose en un amor profundo y hermoso, que hasta al más amargado hacia feliz, así era el hermoso amor de ambos, cálido, inocente y profundo.
Los dioses no se quedaban atrás, más de uno ya tenía su pareja, aún así algo que sorprendió a muchos fue el romance entre dos omegas Hades y Poseidón, ambos tenían a dos hermosas alfas pero decidieron seguir su corazón y los dos se unieron convirtiéndolos así en una pareja que nadie en el Olimpo se esperó que se diera.
Seiya y los caballeros dorados del siglo XXI no se quedaban atrás, Seiya siendo un beta estaba unido a Shiryu un alfa que lo amaba con todo su corazón.
También podríamos incluir a Hyoga y Shun, Hyoga un poderoso alfa y Shun un alfa que parecía más omega que alfa, aún así eran un alfa tan poderoso que el mismísimo Zeus le tendría miedo.
Ikki de Fénix aprendió a vivir sin Esmeralda, su Omega destinada, el dolor nunca se fue, pero Ikki era tan fuerte y valiente que aprendió a vivir con ese dolor.
Y así como esos cinco caballeros de bronce, futuros caballeros de oro, encontraron el amor, a otros tantos más caballeros de oro les faltaba encontrar a el amor de su vida, a su pareja destinada, pero aún faltaba un poco más de tiempo para eso.
Un santuario, muchos géneros presentes, gran variedad de romances y por sobre todo mucho amor era lo que esa dimensión en donde eran un omegaverse, era lo que tan especial la hacía o al menos hacía especial a esta dimensión de muchas otras en las que el omegaverse estaba presente en sus vidas.
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Un nuevo Santuario. -TERMINADA-
RomanceDespués de la última guerra santa, Saori kido mas conocida como Atena trae de vuelta a sus caballeros dorados, un dragón marino compartido y patriarca para poner en orden al santuario de las 12 casas. Quédate conmigo y descubre como 20 personitas c...