¿MI COMPAÑERO DE SEXO O EL AMOR DE MI VIDA?✔️

7- ERES PERFECTA...

CAPÍTULO SIETE

—No entiendo el porqué evadió la pregunta cuando decirte claramente qué son habría aclarado todo, no es suficiente que solo diga ¡Ay que lindo mensaje, lo guardaré! y bla bla bla—Dijo Lizbeth

—Yo digo que eso realmente no importa, disfruta los momentos que pasan juntos y punto, Porque dime ¿De qué te sirve el título?— Agregó Jessy.

—Entiendo, pero no es que para mi sea importante el título, sino que quiero estar consciente de lo que nos une, imagínate que yo a ustedes las considerara mis mejores amigas mientras solo me vieran como una conocida entonces me estaría solo haciendo ilusiones, si voy a ser nadie para él ¡quiero saberlo!.

—Entonces no te imagines grandes cosas, imagínate que no son nada, solo se besan y pasan ratos juntos—replicó Jessy

—¿Imaginarme que no somos nada? no seré su juguete, ¿Qué se supone que debo sentir cuando un hombre me besa con pasión como si fuera lo último que le quedaba, me dice «mi amor» y «te quiero»? ¿Eh?... ¿Todo eso es amabilidad?— sentí que mis ojos estaban a punto de llenarse de lágrimas, pestañé rápidamente para evitar que se cayeran, sentí que si dijera una palabra más habría llorado, realmente no había una gran razón en el caso de Álvaro, pero estuve pensando en como me habían engañado y traicionado en mis relaciones anteriores y anhelaba que   ese caso fuera una excepción y que Álvaro me quisiera de verdad y no me mintiera ni jugará conmigo.

En ese momento estábamos en espera de unas hamburguesas, por suerte nos llamaron y dejamos de hablar del tema y empezamos a comer, supongo que yo lucía poco contenta por como me miraron ambas de repente...

Es que siempre estoy súper alegre por la comida.

—Está bien—dije con tono de rendimiento —¡estoy preocupada! no quiero ser una cualquiera, no quiero que me utilicen como un estúpido objeto de diversión ¿lo entienden? Y no tienen que justificar esto...¡Sigan! La comida es sagrada, no se debe arruinar por nada— retomé antes de que pudieran decir algo.

Unos minutos después... Jessy de pronto estaba masticando con rapidez para decir algo...—El no te ve como un objeto ni como una cualquiera Rebecca—

En ese preciso momento sonó mi celular, me apresuré para sacarlo de mi bolso, era Álvaro.

—Hola
—¿Qué pasó mi amor; como estás?
— ¿Bien y tú?
—Excelente, ¿Qué haces? ¿Dónde estás?
—Estoy con mis amigas en un restaurante...
—¿Te veo hoy?
—Aún no lo sé, pero te avisaré cuando pueda, ya me tengo que ir.
—¡Adiós!

—¿Qué dijo?— pregunta Lizbeth

—Nada importante, Solo que si nos podíamos ver hoy.

—¿Se te olvidó que iré a tu casa hoy?— Preguntó Jessy con expresión de celos en su rostro

— Ya lo sé, por algo le dije que aún no sabía ¿No crees?.

— No quiero estar allí mientras ustedes anden besándose y dándose mucho amor.

Sonreí...— No haremos eso, intentaré no devorar sus irresistibles labios— me mordí el labio inferior.

— Oh si, se nota que no lo harás, con el tono que lo dices—dijo Liz con tono sarcástico.

— Pero Jessy ¿Estas de acuerdo o no?—dije haciendo movimientos circulares con mis dedos en mi cabello, es una buena técnica para convencer, no entiendo el porqué, pero es cierto.