Mis amigos y yo formamos lazos de amistad inimaginables, teníamos lugares específicos cada uno y cada quien ejercía un rol importante dentro y fuera de nuestro grupo. Jamás elegimos un nombre para identificarnos; yo siempre tenía en mente eso solo que jamás lo dije porque sentía que si lo decía, tal vez ellos me creyeran infantil o que eso causara una mala impresión ante los demás. Desde mucho antes que los conociera y me integrara en su grupo yo los observaba de lejos; analizaba a cada uno de ellos para ver si me convenía o no estar con ellos, pero a la final pasaron mi prueba, jamás me preguntaron la razón por la que me quería unir a ellos y salir ya sea en el receso o en horas libres que teníamos cuando los maestros no estaban, desde el primer día ellos fueron distintos; sentía una chispa diferente a lo que había sentido antes, esto era algo nuevo para mi.
Al final de todo nos llevamos bien y estábamos listos para dar lo mejor de nosotros en el último año dentro de la secundaria que me acogió a mí desde el principio; y a ellos casi a mitad del ciclo escolar.
Saben, tengo que aceptar una cosa; siempre he tenido algunas sensaciones extrañas que se clasifican dentro de la palabra "INCREÍBLE", ya saben cosas que si alguna vez dices te considerarían como el rarito del curso... Pues algunas veces evitaba mencionar ciertas cosas para que los demás no se alejen de mi o aún más peor; no quieran ni siquiera hablarme.
Cuando las clases iniciaron por primera vez, lo primero que hice fue encontrarme con mis amigos para ver qué tal han ido sus vacaciones y qué cosas han hecho al transcurso del tiempo; al principio no los encontré a todos debido a que no llegaban aún, así es que la campana sonó y la formación de cada uno de los estudiantes daría inicio. Todos los años comenzábamos con unas palabras de bienvenida por parte de nuestra Directora la Licenciada Gómez; para algunos ella era alguien estricta y algo excéntrica que solo quería que todos sigan reglas y que se deban cumplir, pero para mi no era así, no tenía una buena relación con ella si, pero no la veía como alguien tan mala como decían.
Cuando la directora terminó de dar su discurso y recordarnos las normativas que teníamos que seguir cada uno de los estudiantes, nos mandó a nuestras aulas para ya comenzar con las labores normales, lo bueno es que al llegar al curso encontré al final a los demás que faltaban para completar así nuestro pequeño círculo social de amigos. Cómo es costumbre cada año nos dan algo de tiempo antes que las clases empiecen, por lo que yo aproveché ese tiempo para hablar con cada uno de ellos y ponerme al tanto de cada uno de las cosas que ellos querían decirme, pero algo inesperado sucedió que fue de sorpresa para mi, ya que no había pasado antes...
En un momento menos previsto la directora me llama a su oficina para tratar de un asunto que para ella era de suma importancia, yo no sabía que estaba pasando al principio, pero sabía que si quería terminar con eso debía ir allá y acabar con eso para seguir hablando con ellos lo más rápido posible.
Cuando me acercaba a la oficina de la directora pude notar que había algunos padres de los estudiantes que les faltaban ciertos documentos para completar así su perfil de ingreso; como la oficina quedaba en la 2da planta debía subir escaleras para llegar a la oficina, pero aquí había un pequeño problema para mi... ¡ODIO SUBIR ESCALERAS!, cuando me proponía a subir yo pensaba:
- ¿Para que me querrá ver?, ¿Ahora que hiciste pendejo?, ¿Se habrá dado cuenta de mi trato con la señora del bar?.
Cada vez que me preguntaba a mi mismo qué pasaba o qué hice, todo lo que estaba a mi alrededor se desvanecía. Pero eso no fue lo único raro que ese día pasó; la institución no se caracteriza por tener un amplio perímetro que lo cubría todo; es decir, la institución no era tan grande por ende era muy raro el encontrarse con algunos insectos o animales cerca, pero ese día había una gran presencia de mariposas volando por casi todo el lugar, y cuando estaba a punto de llegar a la oficina, me llamó la atención una mariposa en particular; su color azul marino era maravilloso, y era muy diferente a las demás de su grupo.
Cuando de la nada sentí una pequeña parálisis y todo lo demás se volvió oscuro y escuché un sonido a lo lejos que no podía identificar... ese momento pasó muy rápido; casi como si hubiera parpadeado, pero cuando reaccioné estaba de nuevo en el primer escalón para subir a la 2da planta de la oficina, estaba alucinando, no sabía que fue lo qué pasó, me tomo un tiempo para tolerarlo, pero al final volví a subí otra vez, pero cuando estaba a punto de llegar a un descanso que existía entre el primer piso y el segundo; una señora grita:
-¡HIJO TEN CUIDADO CON LAS ESCALERAS!
El pequeño estaba saltando, cuando de repente cayó por las escaleras, yo lo vi todo a cámara lenta, sabía que debía hacer algo; así es corrí para ayudarlo para evitar que chocase con el piso, y para mi suerte pude salvarlo, el pequeño estaba asustado y la mamá estaba alterada, pero cuando vio que detuve a su hijo de caer me dio las gracias, y yo no sabía que decirle a lo que ella me dijo, y le di una respuesta rápida porque aún así no entendía que era lo que estaba pasando:
-No... se preocupe ahora todo está bien...
Pude sentirme un héroe en ese momento pero no era lo que sentía, los demás ahí me miraban pero no los miré sino que solo avancé, hasta que conseguí llegar a la oficina y pude hablar con la directora acerca del asunto que hizo que llegase hasta su oficina

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Los Días Pasados
Fiksi IlmiahNueva obra después de mucho tiempo de inactividad, esta historia está basado en hechos reales con temática de ciencia ficción y fantasía.