-N-No...-se quejo adolorida, emitiendo pequeños quejidos al sentir como era presionada contra las librerías haciendo que un par de libros cayeran.
Laito sonreía de lado al ver las expresiones de miedo en la joven quien tenia los ojos llorosos del dolor que le provocaba, tenia rato de estar mordiendo y succionando su sangre en diferentes partes de su cuerpo, como su cuello, hombros y ahora se dirigía hacia los muslos pues se puso de rodillas frente a ella y sujeto sus piernas para abrirlas y alzar un poco el vestido, aunque era tan largo que tuvo que subirlo casi todo.
-Hmm..¿crees que usando este tipo de ropa vas a evitarme?...Conejita..solo haces que desee ver que hay debajo nfu..-dijo con gracia antes de acercarse al muslo izquierdo de ella y morder ahí.
Merci soltó un fuerte quejido de dolor y apretó con fuerza sus puños, intentaba soportar el dolor pero era demasiado fuerte y el solo mordía lugares muy sensibles, ademas de que ella era tan sensible al dolor que la pasaba al doble peor.
-P-por favor, me duele mucho Laito!..-decía entre sollozos, a este punto ya estaba rogando debido al insoportable dolor.
- Caray...Bitch-chan aguanta esto y mas..¿Enserió duele tanto, conejita?..pobre de ti..-decía haciendo un ligero puchero antes de lamer la sangre que salía de la herida recién provocada por el.-Aunque ver esa expresión de dolor en tu rostro solo me hace sentir mas deseo de escucharte gritar..ahh..solo de pensarlo me siento muy excitado..-menciono aquello suspirando mientras sonreía.
Adele cubrió su rostro con ambas manos, estaba llorando y quejándose, era tan sensible al dolor que era insoportable sentir un par de afilados colmillos atravesar su piel, ademas de sentir esos mareos que cada vez eran mas y mas intensos. Solía enfermarse, vomitar, desmayarse y sentir nauseas, así que, tenia miedo de sentirse mal en ese momento y peor, que nadie fuera a cuidar de ella como lo hacían sus padres al verla enferma.
-No me siento bien...-se atrevió a decir en voz baja, tocándose la frente con su mano y bajando la mirada.
-¿Huh?...¿Tan rápido te vas a desmayar?..Que aburrido..-mencionó sin ánimos, e incluso restando le importancia, en ese momento se puso de pie y la tomo bruscamente de la barbilla para alzar la mirada de ella haciendo que la viera.-¿Quieres ayuda?...Si la quieres...tendrás que rogarme de nuevo, conejita..-Dijo sonriendo de forma perversa.
Adele estuvo rogando tanto tiempo desde que la tomo en la biblioteca, podría aceptar sin embargo, escuchar que ahora se trataba de una orden solo para saciar el deseo de aquel depravado le molestó mucho y no podía solo ceder a lo que el quisiera. A pesar de estar tan mareada y débil se atrevió a desviar la mirada, mostrando un gesto firme en su pálido rosto.
Laito al observar esa actitud tan retante no pudo evitar reír, burlándose de la joven que parecía querer desafiarlo al no obedecerlo.
-Ahh, ¿ahora intentas ser valiente?...pero...hace un momento me rogabas que te soltara...que conejita tan traviesa..-decía acercando su rostro al oído de ella.
Se estremeció al sentir los fríos labios de el sobre su oído y rápidamente llevó una de sus manos a su boca, mostrándose algo tímida ante la cercanía.
-Di que eres mía..ahora.-ordeno tomándola de la cintura para apegarla a el.
la pelinegra frunció el ceño e hizo un ligero gesto de desaprobación pero solo duro un segundo antes de volver a mostrarse seria, desvió mas la mirada para así no voltear a verlo.
Laito no tuvo mucho paciencia esta vez, solo suspiró levemente y la tiró al suelo antes de ponerse encima de ella, Merci empezó a forcejear pero su fuerza no era un reto para el contrario, quien solo reía al ver como la menor intentaba oponerse.
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Cómo corromper.
Hayran KurguSus ojos brillan en La oscuridad. Pero no alumbran mi camino, solo lo hacen más oscuro. Su sonrisa es hermosa, pero no me hace feliz, solo me aterra. Su tacto es deseado, pero no me hace sentir protegida, me hace sentir expuesta. Su voz es como e...