Ninjas y demonios en Londres (Kuroshitsuji fanfic)

Capítulo 3, Encuentros

El resto del viaje trascurrió sin incidentes, llegaron a Inglaterra tres meses después.

Akimi no podía confiar en nadie allí en Inglaterra, no sabía quien había intentado matarla realmente, quizás había sido la propia reina la que había dado la orden, no podía confiar en nadie por lo que mantuvo su disfraz.

Una vez que se despidió del capitán bajó al muelle, había una gran multitud de gente reunida allí para comerciar los nuevos productos traídos de oriente. Entre ellos un chico más joven aún que Akimi acompañado de un hombre alto y moreno, cuando pasaron a su lado Akimi tropezó y el hombre la sostuvo para que no cayera.

—Perdón...—masculló ella en inglés mientras alzaba la cabeza.

Él era idéntico al hombre de su sueño, no pudo evitar sonrojarse al mirarlo a los ojos sin saber por qué. Apartó la mirada irritada por tal muestra involuntaria de debilidad y el hombre sonrió.

—No se disculpe lady.—dijo ayudándola a recuperar el equilibrio mientras sonreía.

Ante la exposición de su tapadera se sonrojó aún más, mirándolo a los ojos.

—Sebastian. —dijo el chico a su lado, era un tanto bajo y llevaba un parche en un ojo, su vestimenta le resultaba extraña a Akimi, parecía muy cara pero nunca la había visto en los extranjeros que visitaban Japón por lo que no lo sabía con certeza pero probablemente era alguna clase de noble.

—¿Si, joven amo?

—Si ves a alguien disfrazado intenta seguirle la corriente, suele ser por una buena razón.

—¿Cómo su propio disfraz, my lord?

Ante este comentario el chico miró a Sebastian molesto.

—Discúlpenme. —su acento sonaba extraño y probablemente difícil de entender para ellos, aún así ambos la miraron expectantes. —yo...me gustaría saber si conocen un lugar donde podría alojarme, sin llamar mucho la atención.

—Quizás el joven amo pueda proponer su propia hospitalidad para la joven dama. —dijo sonriendo Sebastian.

—¿Sebastian actuando como un buen samaritano? ¿Puedo preguntar por qué tanto interés por una mujer extranjera Sebastian?

—¿Entonces piensa dejarla en la calle, joven amo?

—Si usted lo desea, lady, puede acompañarnos. —dijo mirando a Akimi, después volvió la mirada a Sebastian.— ¿contento? Ahora dime la razón.

—Puede estar relacionada con el incidente que estamos investigando y, otros temas que es mejor que no conozca, my lord. —explicó sonriendo divertido ante la cara de confusión del chico.

Akimi lo miró igual de confusa, al menos tendría un lugar donde quedarse, de repente se acordó de Jack, ¿Dónde se había metido ese demonio inútil?

—My lady quizás debería cuidar a quien se acerca.—dijo una voz tras ella.

Dio un respingo y se dio la vuelta, lo había vuelto a hacer ese maldito demonio, llevaba la ropa con la que lo había visto por primera vez, un traje elegante que, ahora que se fijaba se parecía mucho al que llevaba Sebastian.

—Jack...

Jack sonrió fríamente a Sebastian, sus miradas se cruzaron y se sintió la tensión en el ambiente.

—¿Qué es lo que ocurre...?

—Nada my lady nada.—sonriendo aún. —entonces, ¿estos serán sus anfitriones?

—Así es, se han ofrecido y tampoco es que tengamos otra opción.—le dijo en japonés.

—My lady es una descortesía emplear un idioma que los demás no conocen.